INFRAESTRUCTURAS
Espinosa confía en que el convenio de la EDAR se firme antes de verano
M.R. / Burgos
El convenio que deberán firmar el Ministerio de Medio Ambiente y el Ayuntamiento de Burgos para hacer efectivo el comienzo de las obras de ampliación de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Burgos estará listo antes del verano.
La ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, no aventuró plazos respecto a una infraestructura sobre la que las fechas ya han pasado a un segundo plano y sólo se espera que las obras comiencen. En todo caso, a pesar de que Espinosa indicó que la firma de este nuevo convenio -y ya van siete borradores- será antes de verano y que «inmediatamente» comenzarán los trabajos, lo cierto es que las obras de esta infraestructura no empezarán hasta bien entrado 2011.
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), Antonio Gato, manifestaba a este periódico el pasado mes de febrero que este último acuerdo, por el que la CHD se compromete a licitar y ejecutar la obra financiando el 70% con fondos propios y adelantando el 30% restante que el Ayuntamiento de Burgos deberá devolver en 25 años, conlleva una tramitación administrativa muy compleja que hace que el concurso haya que publicarlo en el Boletín Europeo. El proyecto asciende a cerca de 73 millones de euros entre la construcción de la depuradora y las conexiones con el alfoz.
El portavoz del equipo de Gobierno en el Ayuntamiento, Javier Lacalle, aprovechaba la visita a Burgos ayer de la ministra para reclamar una fecha concreta para el inicio de la ampliación de la EDAR. Espinosa replicaba que «espero que el proyecto, que está en estos momentos elaborando la asesoría jurídica, sea el definitivo». A la vez que recordaba que «el alcalde ha modificado siete veces los convenios con anterioridad» y «si no se firma el convenio es imposible comenzar las obras». Espinosa reiteró el compromiso del Gobierno de suscribir el convenio, por lo que «espero que la voluntad del Ayuntamiento sea exactamente la misma que la del Ministerio». La pasada semana el secretario de Estado de Medio Rural, Josep Puxeu, dejaba claro que el Ministerio no iba a rectificar su decisión de construir una planta potabilizadora para abastecer de agua a 55 localidades de Campos de Muñó. Una decisión que no cuenta con el apoyo de la mancomunidad, que no descarta acudir a los tribunales para reclamar la solución que desde el comienzo han reivindicado, engancharse a la red de abastecimiento del Ayuntamiento de Burgos. El presidente de la Diputación, Vicente Orden Vigara, aseguraba hace unos días que «lo que queremos es que haya agua, ya sea de Burgos o de la potabilizadora». Palabras que ratificaba el portavoz del PP en la Diputación, Borja Suárez.
Sin embargo, el cambio de criterio del Ayuntamiento de Burgos para que los municipios de Campos de Muñó pudieran tomar el agua de la red de Burgos llegaba a principios de este año. La mancomunidad votó casi por unanimidad a favor de retomar el proyecto original y sólo quedaba saber qué decisión había tomado Aguas del Duero.
La ministra indicaba que este proyecto «está consensuado con la Comunidad Autónoma, no podemos olvidar el Plan de Calidad de Aguas que hemos firmado por 1.050 millones de euros, y siempre actuamos bajo el consenso». Y recordó que el abastecimiento de aguas «no es competencia del Gobierno».