Sanidad detecta 53 casos de colesterol hereditario
Desde 2008 se han realizado 97 test en Burgos. El 70% de los afectados no está diagnosticado
L. B. / Burgos
Un centenar de burgaleses se han sometido en los últimos tres años a la prueba para detectar hipercolesterolemia familiar, es decir, colesterol hereditario. Del total de casos, en 53 el resultado era positivo y permitía iniciar un tratamiento específico para prevenir los riesgos cardiovasculares prematuros asociados a esta patología.
Con todo, Begoña Calleja, responsable en Burgos del programa autonómico de detección precoz de esta enfermedad puesto en marcha por la Consejería de Sanidad a finales de 2008, opina que la implantación de estos sencillos test es «lenta» y cree que tendría que generalizarse. Algo que, habida cuenta de que se estima que siete de cada diez personas que tienen este tipo de colesterol congénito y hereditario lo desconoce, parece más que necesario.
El reto, a juicio de Calleja, es que los médicos de Atención Primaria «tengan más en cuenta que existe la posibilidad de realizar esta prueba y la incorporen a su rutina». De hecho «el programa regional se creó precisamente para que ellos también pudieran solicitar el citado test y aún siguen haciéndolo en mayor medida los especialistas, que ya estaban habituados a ello», precisa Calleja.
Y es que con esta iniciativa coordinada por el Servicio Territorial de Sanidad nacía con la intención de llegar a más población, a la máxima posible, también a aquella que resida en zonas aisladas. Y llegar cuanto antes.
«Lo ideal sería diagnosticar el colesterol familiar en la infancia para que la prevención fuera más eficiente», explica Calleja que añade a los obstáculos a superar lo difícil que es «que los pacientes se lo tomen en serio y se mentalicen de que un colesterol alto es un problema de salud que puede tener consecuencias graves».
Respecto a la tasa de casos positivos que arrojan las pruebas realizadas, la responsable del programa en Burgos indica que se encuentra dentro de lo esperado.
La estadística distingue dos tipos de pruebas, la que se realiza a los casos índice, el diagnosticado en primer lugar, y la que desde ese momento se solicita para sus familiares de primer grado «en el caso que accedan a ello o les localicemos», precisa Calleja, en referencia a las complicaciones se encuentran para realizar un estudio familiar completo.
Así, en Burgos se han sometido a la prueba de detección 69 casos índice y 27 casos de familiares de primer grado. Del total de pruebas 32 y 21, respectivamente, resultaron positivas. «La proporción de diagnósticos en los parientes es más elevada porque puede decirse que es esos estudios vamos casi a lo seguro y las probabilidades son muy elevadas», aclara la coordinadora del programa en Burgos.
De vuelta a la sensibilización de los profesionales sanitarios de Atención Primaria, Begoña Calleja detalla que la Fundación Hipercolesterolemia Familiar, con la que mantienen una estrecha colaboración, dispone de una web en la que ofrecen material para despejar cualquier duda, «desde los factores de sospecha hasta los detalles del procedimiento diagnóstico». Además, desde el Servicio Territorial de Sanidad se imparten charlas formativas sobre el tema.
Por otra parte, cabe destacar, según los datos facilitados por la Consejería de Sanidad, que la provincia con mayor número de estudios realizados hasta mediados de este año es Valladolid, con 171 pruebas a casos índice y 35 a familiares. La sigue León, con 116 y 49; y Salamanca, con 106 y 26. A la cola se encuentra Zamora, aunque presenta una elevada tasa de positivos, un 80% de 47 estudios.