Cerrar

Una tercera parte de las píldoras del día después se pide con receta

En 2011 y 2010 se prescribieron 317 y 371 frente al millar de años anteriores

Burgos

Creado:

Actualizado:

L. B. / Burgos

La ministra de Sanidad, Ana Mato, reavivaba el pasado mes de febrero el debate que en 2009 abrió el anterior Gobierno al permitir la adquisición de la píldora del día después sin receta médica. La responsable del área aprovechaba su primera comparecencia en el Congreso de los Diputados para anunciar que había encargado un informe sobre este anticonceptivo, la regulación europea y sus efectos secundarios. Semanas después avanzó que las valoraciones recabadas «no eran concluyentes ni coincidentes».

A la espera de una decisión al respecto y al margen de discusiones ideológicas o científicas, los datos hablan del impacto de la medida que ahora se cuestiona. Y en este sentido cabe señalar, según las cifras aportadas por la Gerencia Regional de Salud, que todavía se prescribe un tercio de las píldoras del día después, a pesar de que ya no sea obligatorio para obtenerla en las farmacias, que la dispensan sin receta.

Así, en 2011, los centros dependientes de la Gerencia de Atención Primaria de Burgos prescribían 317 tratamientos con levonorgestrel. Menos todavía que en 2010, cuando el total de píldoras poscoitales ascendió a 371.

Estos datos suponen la tercera parte de los registrados en 2009, año en el que se aprobó la nueva norma y en el que se recetaban 1.076, y en 2008, con 1.038.

En vista de este 'desplome' la media actual por fin de semana no llega a seis recetas de píldoras del día después, frente a las 20 de 2009. Y es que es en estos días cuando, según los expertos, se suele concentrar la demanda de estos anticonceptivos de emergencia pues van unidos al consumo de alcohol o a las noches de fiesta.

La píldora del día después debe tomarse antes de que transcurran 72 horas tras una relación sexual de riesgo. Durante este periodo, el medicamento puede prevenir un embarazo no deseado. Sin embargo, para obtener una mayor eficacia, el tratamiento debe iniciarse lo antes posible después de haber mantenido relaciones sexuales sin protección.

En España existen dos preparados de levonorgestrel: Norlevo y Postinor. La presentación más habitual es una pastilla de 1.500 microgramos de esta hormona aunque también se puede encontrar en los comprimidos de 750 microgramos cada uno. El precio del producto ronda los 20 euros. Lo principal es tomarla lo antes posible tras el coito de riesgo.

Sobre estos y otros detalles los profesionales sanitarios tiene la obligación de informar. Si se opta por eludir la receta el farmacéutico es el encargado de aclarar cualquier duda.

Y no sólo sobre la píldora del día después. De hecho, en relación con los anticonceptivos orales, los boticarios de Burgos iniciaban la semana pasada una campaña divulgativa, con el objetivo de descartar los «falsos mitos asociados». «Cada paciente ha de conocer el medicamento que está tomando, sus interacciones, sus reacciones adversas, sus efectos secundarios, así como el uso correcto del fármaco para minimizar éstos y conseguir el efecto buscado», precisan.