Las administraciones deben a Cáritas cerca de un millón de euros

MARTA CASADO / Burgos

La crisis sacude muy duro a los últimos como se suele decir en el argot de Cáritas. Los servicios de esta ong de la Iglesia son más necesarios cuando la bolsa de esos últimos ha aumentado tanto en los últimos años. Pero este servicio tiene un coste. El proyecto de atención a personas sin hogar, Apoyo a Familias y el Centro de Apoyo al Menor, servicios que deben ofrecer las administraciones pero que gestiona Cáritas por convenio, arrastra diversos impagos que ascienden a 930.000 euros.

«Tenemos la certeza que lo cobraremos este mes cobraremos algo por el sistema de facturas», apuntó ayer en el balance de la Memoria 2011 de Cáritas su delegado Diocesano, Andrés Picón. Según estas declaraciones, Cáritas es uno de los cerca de 500 entidades que se han acogido al pago a proveedores en Burgos y también a aquellos que lo han hecho en los ayuntamientos de Aranda y Miranda y al plan similar aplicado en el  Gobierno autonómicos. «Veo la situación de las administraciones y es muy difícil al menos a nosotros no nos han bajado las cantidades que en algunas comunidades han bajado hasta un 50%», apuntaba. Al mismo tiempo Picón daba las gracias a los donantes. «Este año gracias a que los donativos han sido más generosos y ha habido más herencias hemos podido subsistir, mantener los servicios con la misma calidad y no tener que acudir al crédito».

La entidad ha invertido en todos sus programas 3,69 millones de euros. De ellos el 70% corresponden a donaciones, 2,6 millones de euros. Y el resto son aportaciones de las administraciones de las que destacan los proyectos conveniados que en Burgos asciende a 525.754 euros, en Aranda 30.000 euros y en Miranda 76.133 euros, que arrastran retrasos de pago. Además está la Junta de Castilla y León con 140.400 euros. A parte reciben subvenciones para sus proyectos que se corresponden con 78.613 euros del Fondo Social Europeo, 237.299 del Gobierno estatal, 397.596 de la Junta de Castilla y León y de los ayuntamientos de Burgos, Aranda, Miranda y Lerma hasta 233.548 euros. 

La línea de apoyo de Cáritas pasa desde la misma atención de urgencia, ofrecer un techo donde dormir, un café caliente o una comida. Pero eso sólo es el principio de un programa que busca ofrecer «una atención integral para facilitar la reinserción de la persona no queremos dar y que se acostumbren al todo gratis porque nuestro problema es que estos ciudadanos no dejen de luchar», sentenció.