Las estaciones de servicio constatan un 29,7% menos de ventas con el 'centimazo'

M. R. / Burgos

Los profesionales de las estaciones de servicio de la provincia consideran que el daño que está realizando la aplicación del 'céntimo sanitario' a los carburantes por parte de la Junta de Castilla es «tremendo», según el presidente de la Agrupación Española de Vendedores al por menor de Carburantes y Combustibles (Aevecar), Rafael Pizarro. Según los últimos datos oficiales, del mes de marzo, la venta de carburantes cayó en Burgos un 29,7% y la Junta ha dejado de recaudar entre 8 y 9 millones de euros, según Pizarro.

La aplicación de esta medida «nos hace más pobres y menos competitivos» que otras comunidades autónomas. Especialmente con las limítrofes. Una de las principales consecuencias, según los representantes de este sector, es que los clientes se van, lo que genera un efecto dominó en todo el negocio que se genera alrededor. Pizarro indicó que más de la mitad del precio de los carburantes se destinan a impuestos, que se distribuyen en tres tramos de los que el Gobierno regional recauda unos elevados porcentajes. En este sentido, el representante de las estaciones de servicio recordó que se ha intentado celebrar reuniones con la Junta para tratar este asunto, pero aún no han obtenido respuesta. Por otro lado, Pizarro insistió en que el 'céntimo sanitario' es «ilegal porque quiebra la unidad fiscal y no se ha demostrado que todo lo recaudado fuera para Sanidad»