Cabalgata entre dos mundos

N. E. / Burgos

Entre la realidad y la ficción, entre la vieja Castilla y el Nuevo Mundo. Estos fueron los hilos conductores de la Cabalgata de este San Pedro 2012 que se desarrolló con sol y calor, que ya tocaba después de dos jornadas de fiestas algo destempladas.

El mundo imaginario abrió la cita de este año. Un dragón de grandes dimensiones encabezaba el desfile. Procedente desde Francia, esta criatura pretendía desquitarse de la victoria de la Selección Española de Fútbol, el sábado por la tarde, después de dejar fuera de la Eurocopa a sus compatriotas. Sólo así se entendía su mal humor. El dragón gruñía y echaba humo y provocó las lágrimas de algún que otro pequeño espectador, pero no logró sacar a nadie de sus 'casillas'. Eso sí, analogías a parte con otras realidades futbolísticas que nada tienen que ver en el asunto que nos ocupa, el gran dragón despertó admiración entre los burgaleses, que se quedaron expectantes ya que la Cabalgata prometía con este llamativo comienzo.

La realidad, el mundo más cercano, estuvo representado en las peñas, las danzas y las charangas que son las encargadas de animar la ciudad desde Eladio Perlado hasta la plaza del Cid haga frío o calor. A ratos, los grupos locales tenían que ceder protagonismo a compañías de teatro o bien a grupos folclóricos, procedentes de ese Nuevo Mundo, al que hubo continuas alusiones con motivo del quinto centenario de las Leyes de Burgos.

La tribuna de autoridades, con buena parte de la Corporación municipal, también representa la realidad local. Junto a los políticos, se ubica la corte real de reinas y damas de las peñas. Este año tanto la Reina Mayor, Eva Gutiérrez, de la asociación Danzas María Ángeles Saiz, como la Infantil, Lucía Fraile de Estampas burgalesas, tuvieron el honor de llegar a bordo de vehículos antiguos, auténticas joyas que no pasan todos los días por la calle Vitoria. Desde el popular 600, a lujosos Rolls Royce, también tuvieron su momento de protagonismo en la Cabalgata de San Pedro.

Otras costumbres representadas a lo largo del desfile, que se prolongó hasta más allá de las 14.30 horas, fueron los saludos a las reinas, así como al alcalde, invitándoles a beber de la bota. La jornada fue tan cálida que era necesario ingerir líquidos para no caer víctimas de una lipotimia.

Más ficción

El grupo de teatro Cal y Canto lució coloridas cometas que representaban a distintos habitantes de los océanos. Por su parte 'Pa'lo que sea' animó el desfile con distintos 'seres' que representaban la Humanidad y la Libertad.

La imaginación de las peñas se vio representada este año en cuatro carrozas a las que se sumaron otras dos municipales, estas últimas elaboradas por la Asociación de Artistas Plásticos de Gamonal.

Fue ahí sobre esas carrozas donde se unieron viejo y nuevo mundo. Un salto desde 1512 a 2012, cinco siglos, quinientos años separan la promulgación de las Leyes de Burgos, la primera normativa impresa que velaba por los derechos de los indios en las tierras descubiertas por Cristóbal Colón.

Una carabela procedente de Gamonal surcó la calle Vitoria, luciendo el estandarte del primer premio en el concurso de carrozas. La Sociedad Real y Antigua de Gamonal recibió 4.500 euros de premio en recompensa por su trabajo creativo al que denominaron 'La Cultura y el Nuevo Mundo'. Junto a la tribuna de autoridades y al son del himno de España, el galeón izó el palo mayor como saludo a los burgaleses.

El segundo premio (3.500 euros) fue para el Centro Cultural Mexicano con la carroza 'Burgos otorga'. De un lado se encontraban los Reyes Católicos y del otro una familia indígena.

La peña Antonio José logró con 'Somos Historia' el tercero de los premios dotado con 2.500 euros. En su carroza se podían ver elementos relacionados con Burgos, con su Papamoscas, y otros del Nuevo Mundo como las pirámides propias de la cultura Maya.

El último de los reconocimientos, el cuarto, fue para la Peña Colón. Con su carroza 'Entre dos culturas' lograron 1.500 euros.

Luciendo imaginación y ganas de fiestas fue transcurriendo la Cabalgata con ritmos llegados desde Bolivia y otros de Colombia. Con música de dulzaina, con charangas y para finalizar con las sevillanas de la Casa Regional de Andalucía.