Ibañez confía en renegociar el coste del desvío este año

JUAN MAIQUES / BurgosEl inicio del nuevo curso político se antoja de vital importancia para los intereses de la ciudad. Será «a partir de septiembre», tal y como recordó el vicealcalde, Ángel Ibáñez, cuando se retomarán las conversaciones con el Ministerio de Fomento para la renegociación del convenio del desvío ferroviario. Un acuerdo que el también concejal de Urbanismo espera que pueda estar cerrado «antes de que finalice el año».

Con la visita en mayo a la capital de la ministra de Fomento, Ana Pastor, se abrió el camino para que a principios del mes de junio se mantuviera un primer encuentro en Madrid con altos cargos del Ministerio en el que, tal y como relató el edil tras la reunión, «se conocieron detalles nuevos que antes eran desconocidos» por el Ayuntamiento. Entre otras cosas, por los impedimentos que, según reitera el Partido Popular, puso el Ejecutivo de Zapatero para propiciar encuentros entre las dos administraciones.

Si bien por esas fechas se estimaba que el sobrecoste rondaría los 30 millones de euros, días más tarde se elevó por encima de los 100 para un coste final de las obras de 257 millones (la ejecución se presupuestó en 115).  Claro, que ahí se incluían todos los gastos (expropiaciones, reclamaciones de las empresas, intereses de demora por los atrasos en los pagos, la decisión de modificar el ancho de vía...). Costes, la mayoría de ellos, que el equipo de Gobierno ha entendido siempre que no le son imputables al Ayuntamiento.

Así las cosas, dar una cifra en este momento de lo que le podría costar al Consistorio el sobrecoste del desvío es prácticamente imposible. Primero, porque las negociaciones son complejas y están muy abiertas, y segundo porque se prefiere mantener la discreción en las conversaciones y no desvelar ninguna carta que pueda perjudicar el desarrollo de las mismas.Sigue en la edición impresa