Un recorrido histórico por el día a día de la Guardia Civil

M. R. / Burgos

Las imágenes como eficaz vehículo de transmisión de la realidad a través de los tiempos son la herramienta elegida por la Comandancia de la Guardia Civil de Burgos para realizar un recorrido histórico de la presencia del Instituto Armado en la provincia. Un repaso que abarca desde los inicios de la Benemérita, en 1844, hasta los años 60.

El subdelegado del Gobierno, José María Arribas, junto con el presidente de la Diputación, César Rico, y el teniente coronel jefe de la Guardia Civil en Burgos, Miguel Salom, inauguraron ayer la muestra 'La Guardia Civil en Burgos a través de la Fotografía Histórica'. Una exposición que se podrá ver en el Consulado del Mar hasta el próximo 14 de octubre. Según explicó el teniente coronel Salom durante la presentación, la muestra pretende «ubicar a los guardias civiles en la historia de la sociedad burgalesa» a través de las imágenes. Una selección de 101 fotografías y grabados que pasado por un exhaustivo trabajo previo de búsqueda e identificación en archivos públicos, como los de la Diputación, el Museo Militar y el Archivo Municipal, y privados. «Cuando hemos pedido las fotografías de la provincia, hemos intentado sacar un nexo», según explicaba el comisario de la muestra. Esa unión ha sido la Cartilla de la Guardia Civil.

Por una parte, la muestra ofrece un recorrido histórico de los servicios que la Benemérita presta en la provincia. En este sentido, la primera imagen data del año 1855, y se ha tratado de unir esas fotografías con grabados de publicaciones de la época. Las imágenes reflejan también cómo era el modo de vida y las singularidades del trabajo de la Guardia Civil y del periodístico. En la exposición se puede ver un grabado de un accidente de ferrocarril ocurrido en 1891. El fotógrafo no pudo llegar hasta el día siguiente por la tarde, por lo que «hubo alguien que hizo un grabado de un primer boceto que realizó un hijo de alguien que viajaba en el ferrocarril». Posteriormente se hicieron fotografías, aunque sin guardias civiles porque, obviamente, había pasado todo.