3.500 personas claman contra el bulevar
La plataforma, animada por la respuesta, convoca una nueva manifestación el 13 de diciembre. Insiste en que «no es el momento» y reclama que se escuche al barrio
L. B. / Burgos
Al grito de ‘Gamonal no quiere el bulevar’ 3.500 personas se lanzaron ayer a la calle Vitoria para exigir al Ayuntamiento que detenga este proyecto. La portavoz de la plataforma ciudadana promotora de la protesta, Ana Moreno, recordaba que el objetivo de la convocatoria era «que se vea que el rechazo no es cosa de dos ni de tres, en realidad somos muchos los que no queremos que esta obra se haga por varias razones, sobre todo porque no es el momento, porque hay muchas deudas que pagar antes y bastantes necesidades a las que destinar ese dinero».
Lograda la deseada demostración de fuerza, tras culminar el recorrido se anunciaba que repetirán el 13 de diciembre. Antes, el 4, tendrá lugar una asamblea vecinal.
Más allá del calendario, los impulsores de la protesta ciudadana confían en obtener resultados tras el despliegue de ayer. «Que se sienten a hablar sería la mejor manera de resolver este problema porque cuando algo se enquista termina mal», indicaba Moreno antes de saber el respaldo multitudinario que tendría la movilización.
Jóvenes, mayores, incluso niños, todos bien abrigados, se sumaron al recorrido que cubrió el mismo trayecto que se va a transformar en el controvertido bulevar.
La comitiva partía puntual de la iglesia Real y Antigua al tiempo que comenzaba a chispear. Pero no hubo que abrir los paraguas y los cánticos contra el proyecto fueron ganando volumen para caldear el gélido ambiente. A las tradicionales proclamas como ‘Manos arriba esto es un atraco’ se añadían otras elaboradas para la ocasión: ‘No al bulevar’ ‘No queremos recibos abusivos’ o ‘Lacalle escucha, Gamonal está en lucha’. También se destinaba alguna a aquellos colectivos que han manifestado su apoyo a la infraestructura: ‘¿Dónde está el consejo de barrio?’.
Así, sin incidencias y con mucha calma (el recorrido se prolongó durante hora y media) los miles de manifestantes llegaron a la altura de Fátima para regresar de nuevo al punto de partida.
Si por algo destacaba el grupo era por su consistencia, la temperatura obligaba a caminar en pelotón. Los policías que abrían camino tenían de hecho serios problemas para calcular el número de asistentes por este motivo.
Entre el gentío no faltaron rostros conocidos de la política local. Todos los grupos de la oposición estuvieron presentes en la cita como ya habían anunciado. Raúl Salinero, el único concejal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento; Luis Tudanca, Esther Peñalba, Antonio Fernández Santos, José María Jiménez y Carlos Mahamud, del PSOE; y Roberto Alonso y Julián Altable, de Unión Progreso y Democracia, expresaron en la calle el rechazo al proyecto que sus formaciones ya han mostrado en numerosas ocasiones ante los micrófonos y en el propio Pleno municipal.
Ninguno de ellos, eso sí, se colocó detrás de la pancarta que encabezaba la manifestación y que resumía el sentir de los presentes: ‘Bulevar calle Vitoria ¡ahora no! Esos 8 millones de euros hacen falta para otras necesidades’. A ella se sumó otra, rubricada por la asamblea de parados que avisaba: ‘El paro no nos parará’.