Cáritas constata un retroceso en derechos relacionados con vivienda, empleo y salud
Recibe 175 demandas de ayuda al día. El 40% de los que acuden carecen de ingresos
Burgos
Cáritas Burgos aprovechaba ayer la presentación de su memoria de actividad durante 2013 para cuestionar las políticas de austeridad en auge ya que, según la organización diocesana, «no son neutrales en términos distributivos y elevan los niveles de sufrimiento social». Los representantes de la entidad, capitaneada por Óscar Moriana, criticaron especialmente los retrasos y restricciones en el acceso a ayudas públicas y afirmaron que en su labor cotidiana han constatado un «verdadero retroceso en los derechos que tienen que ver con el trabajo, la vivienda y la salud».
Los datos que manejan subrayan la alarma. Y es que en la actualidad Cáritas recibe 175 demandas de ayuda al día, 43.767 al año, lo que ha obligado a la organización a ampliar sus recursos para atender todas las necesidades. «Este incremento es acorde con el empeoramiento de las situaciones. Es evidente la cronificación de la exclusión que se traduce en el aumento de la pobreza severa», afirman desde la entidad social.
Sobre la falta de empleo, las cifras ‘cantan’. Un 77% de las personas que Cáritas atiende están afectadas por el paro y el 40% carece de cualquier ingreso. No obstante, esta realidad se topa con el descenso significativo de ofertas de trabajo y por lo tanto el de inserciones laborales logradas por la organización. Con todo, en 2013 se lograba ‘devolver’ al mercado a 378 personas. A esta labor contribuye la empresa de inserción gestionada por Cáritas.
Como soluciones, la entidad plantea reforzar las rentas mínimas y reducir los requisitos y los plazos para obtener las rentas garantizadas de ciudadanía, además de aumentar su cuantía. Reclama también impulsar las cláusulas sociales en las contrataciones públicas.
Cada día 74 personas duermen en dependencias de la organización por falta de un techo y 72 familias reciben alimentos en los economatos.