La oposición se va del Pleno tras la maniobra del PP por un código ético

N. E. / Burgos

Política, ética y código de buenas prácticas. Puede que algún día estas palabras puedan ir juntas sin chirriar, pero todo indica que habrá que esperar. Desde ayer el Ayuntamiento está adherido expresamente al código de Buen Gobierno Local, aprobado por al Federación de Municipios y Provincias (FEMP) en el año 2009. Pero eso sí lo aprobó en solitario el Partido Popular ya que la oposición en su conjunto abandonó el Pleno municipal al considerar la maniobra política del equipo de Gobierno «vergonzosa» y «falta de ética».

Todo comenzó con la proposición que llevaba al Pleno UPyD solicitando la elaboración de un Código Ético y de Buenas Prácticas en el Ayuntamiento de Burgos. La concejal Rosario Pérez Pardo defendió la necesidad de alejar cualquier forma de corrupción de la política. Se mostró a favor de que ninguna persona perteneciente al Ayuntamiento pueda aceptar regalos, de que los imputados en delito con apertura de juicio oral sean suspendidos de sus ingresos y de que toda persona del Ayuntamiento rinda cuenta de sus gastos con cargo al erario municipal. También pidió que se limiten los puestos de libre designación y que sean desempeñados por funcionarios de carrera.

Para el edil de Izquierda Unida, Raúl Salinero, que calificaba de muy genérica la moción, «las buenas palabras no van a cambiar el sistema». Mientras, Esther Peñalba, del PSOE, defendía la necesidad de «prestigiar» la política. Los representantes de la oposición aprovecharon la ocasión para reprochar al PP distintas cuestiones como un viaje a Niza de hace ya varios años que estuvo pagado por una empresa, según denunció la edil socialista.El portavoz del PP, Ángel Ibáñez, que aseguró no querer entrar en «el y tú más». Criticó a UPyD de «enarbolar la bandera de la regeneración democrática» y calificó la moción de «moralina». Sin embargo, a continuación dijo: «Estamos de acuerdo en el espíritu» y propuso acogerse al código del Buen Gobierno Local de la federación de municipios. Desde las filas del PP, criticaron el texto de la formación magenta, les acusaron de trabajar poco sus mociones y denunciaron que no se diferenciara en sus argumentos entre empleados municipales y cargos políticos. La votación terminó alejando cualquier intento de acuerdo y el PP votó en contra de la proposición que fue respaldada por los tres partidos de la oposición.

Este final no gustó a los ciudadanos que estaban presenciando el Pleno, que recriminaron que no hubiera acuerdo en este tipo de cuestiones.

El debate no quedó aquí. Al terminar el capítulo de ruegos y preguntas, el PP se desmarcó presentando una moción de urgencia para adherirse al código del Buen Gobierno Local.

Toda la oposición saltó en bloque, al no entender a qué venía esta nueva proposición y menos la urgencia, cuando se acababa de desechar la de UPyD tras un largo debate.Sigue en edición impresa