Niegan el error en el pago de las oficinas electrónicas

N. E. BURGOS

La cantidad abonada a la Fundación Europea para la Sociedad de la Información ha sido correcta porque corresponden a servicios que sí se han prestado. Con estas palabras, el vicealcalde Ángel Ibáñez quiso zanjar la polémica suscitada el pasado lunes por el concejal de Hacienda, Salvador de Foronda, al explicar que en la comisión de su área se aprobó el pago extrajudicial de una factura de 51.000 euros, que primero fue anulada y que después fue llevada al contencioso por la mencionada entidad.

Foronda aseguró que se había cometido «un error» al no anular el contrato con la Fundación en noviembre de 2010 y que por tanto se pagaron los ejercicios de 2011/2012 y de 2012/2013. La primera factura se abonó sin más, mientras que fue la segunda la que fue anulada por él y sobre la que se tuvo que llegar a un acuerdo antes de ir a juicio.

El contrato con la Fundación Europea para la Sociedad de la Información se firmó por el periodo de 2006 a 2011 e incluía una cláusula en la que el convenio se prorrogaría por un periodo igual de tiempo siempre que no se comunicase lo contrario con seis meses de antelación. Pues bien, la comunicación no se realizó y la empresa entendió que seguía prestando el servicio que consistió en la instalación de doce puntos de información sobre la administración electrónica en distintas dependencias municipales como los centros cívicos. El concejal de Hacienda aseguró que la empresa había desmantelado los puntos de información y, por tanto, el servicio no se prestó al menos en el año 2012, según un informe realizado por la jefa de la sección de Servicios. Después de todas estas afirmaciones, ayer, en la reunión de la Junta de Gobierno se puso de manifiesto que estas oficinas, que permitían hacer gestiones de administración electrónica a los ciudadanos, estuvieron instaladas hasta principios de 2013. Así, Ibáñez aseguró que los periodos de pago que se han acreditado, dentro de un proceso judicial, estaban correctos porque el servicio se prestó. «Lo dice un informe del jefe del departamento de informática del 25 de enero de 2013 en el que se indica que las oficinas electrónicas se retiraron y se guardaron en almacenes municipales en esas fechas», afirmó el vicealcalde, quien añadió que Foronda reconoció ante los miembros de la Junta de Gobierno que Ibáñez no tenía ninguna responsabilidad sobre el servicio de nuevas tecnologías durante todo ese periodo.Sigue en edición impresa