Los noruegos de Covarrubias

Cuando en 1962 encontraron e identificaron el sepulcro de una princesa noruega en la Colegiata de Covarrubias, todo el mundo se quedó sorprendido. Castellanos y noruegos habían olvidado a esta joven princesa que recorrió una distancia impresionante en la época, para casarse con un infante castellano. Esta fue una excusa perfecta para retomar unas antiguas relaciones entre los dos países que culminaron, en 1992, con la creación de la Fundación Princesa Kristina. «El Infante de Castilla Don Felipe, esposo de la princesa, le había prometido la construcción de una capilla en honor a San Olav», explica el presidente de la Fundación Venancio Díaz-Guadamino «esta promesa fue incumplida, por eso entre nuestros objetivos estaba la construcción de una ermita en honor al patrón de Noruega».La construcción de esta capilla fue un proceso largo y costoso que contó con la financiación de la Junta de Castilla y León y de un gran número de empresas y entidades privadas y públicas españolas y noruegas. «Es nuestro faro. Queremos que sea un centro donde realizar actividades no estrictamente religiosas, para darle más uso que el de la romería».La ermita de San Olav se inauguró en octubre de 2011 cumpliéndose así uno de los objetivos de la fundación, pero esta asociación ha realizado multitud de actividades culturales encaminadas a consolidar las relaciones entre España y Noruega. «Han venido músicos noruegos de muy alto nivel a hacer conciertos», añade Díaz-Guadamino. Los conciertos han sabido combinar la cultura española, con conciertos de música flamenca, con artistas noruegos, e incluso sopranos de alto nivel internacional.Otra de las acciones dirigidas a difundir la historia de las relaciones entre los dos países ha sido a través de la publicación de libros, pero también han hecho conferencias y han organizado excursiones de Noruegos a Covarrubias y de Burgaleses a Noruega. «Hay muchos noruegos que pasan el invierno en España, y desde que saben de nosotros, se animan a venir a visitarnos. Este año han venido unos 1.500», comenta Díaz-Guadamino.Todos los años en el mes de septiembre la fundación organiza la ‘Semana Noruega’ en la que además de conciertos, se realiza un mercadillo de productos artesanales y el año pasado organizaron un asentamiento vikingo «hicieron recreaciones sobre la vida y las costumbres de este pueblo y fue algo muy interesante», explica Díaz-Guadamino.La financiación de la asociación cuenta con 17 patronos de los cuales, la mitad es de nacionalidad española y la otra mitad, noruega.La sede se encuentra en el edificio que ocupaba la antigua farmacia de Covarrubias y desde allí organizan todos las actividades, además de contar con tres camas para poder alojar a jóvenes noruegos que deseen venir a pasar unos días en intercambio. «Esta idea está funcionando muy bien y tenemos mucha ilusión porque siga generando interés», comenta Díaz-Guadamino.Más información en edición impresa