El edificio de la calle Aranda se licitará por menos cuantía
En el primer concurso, que quedó desierto, se pretendía vender por al menos 2 millones
El Ayuntamiento volverá a sacar a la venta el edificio de la calle Aranda con una nueva condición que consistirá en que la ciudad se quedará con locales ubicados en los bajos, una vez que el adjudicatario derribe y reconstruya un edificio de nuevas viviendas.
El vicealcalde, Ángel Ibáñez, aseguraba ayer que existen varios grupos empresariales interesados en hacerse con este céntrico inmueble donde se pueden construir viviendas con sus correspondientes garajes. La nueva condición de que el constructor entregue los locales para diversos usos municipales, aún por definir, hará que el edificio pueda ser enajenado por una cantidad menor de lo que se preveía en un inicio. Esta cuestión está siendo definida, según dijo Ibáñez, que indicó que cuando se resuelva se indicará el precio de salida del inmueble. En el concurso que se abrió a finales de 2014 se preveía vender el edificio por un mínimo de 2.026.148 euros. Los interesados debían pujar al alza, aunque en aquel primer intento no hubo nadie que formalizase la operación de compra-venta.
Por otro lado, en la Junta de Gobierno de ayer se dio cuenta de que el Ayuntamiento recibirá 200.000 euros por la venta de patrimonio municipal del suelo. En este caso se trata de una parcela de 444 metros cuadrados en la calle San Pedro de Cardeña donde varias mercantiles están interesadas en desarrollar la unidad de actuación. Estos 200.000 irán al capítulo de ingresos provenientes de la enajenación de suelo municipal, igual que en su caso en un futuro la venta del edificio de la calle Aranda.
Ibáñez rechazó las críticas del PSOE sobre la próxima aprobación en Pleno del plan especial del centro comercial que promueve Inbisa, en la calle Vitoria número 305. El responsable de la gerencia de Fomento negó que se estuviera tramitando esta iniciativa con prisa y con flecos pendientes de resolver ya que recordó que hace algo más de un año que se desarrolló el trámite de la aprobación inicial. Con respecto a la fórmula de aparcamiento que recoge el proyecto con respecto al 25% de las plazas que estarán situadas en una zona de marquesinas cerradas por tres lados, Ibáñez señaló que este planteamiento cuenta con un informe técnico favorable ya que sigue los criterios urbanísticos de la ciudad. «No es cierto que no se esté cumpliendo con la dotación de plazas de aparcamiento», dijo, aunque matizó que se está esperando un informe de la Consejería de Fomento para ver si las marquesinas cumplen los criterios de la Junta. Criticó que el grupo municipal socialista rechace este proyecto inversor para la ciudad que supondrá unos 30 millones y la creación de 400 puestos de trabajo en un nuevo parque comercial de 26.000 metros cuadrados.