Dos de cada diez pruebas de drogas al volante dan positivo
La Policia Local empezó a realizar estos test a conductores en enero En 53 controles de drogas llevados a cabo se han detectado 14 positivos
La concienciación sobre no conducir bajo la influencia del alcohol ya había calado entre los conductores después de años de campañas de información y, también, por el endurecimiento de las penas y de las sanciones económicas. Esto había hecho que los positivos en los controles que realizan cada fin de semana la Guardia Civil en las carreteras de la provincia y la Policía Local en las de la capital fueran casi testimoniales.Sin embargo, esa cultura del ‘si bebes no conduzcas’ parece que todavía no ha calado entre parte de los conductores. De manera especial en la capital, donde los fines de semana muchos de los desplazamientos son cortos. De hecho, dos de cada diez conductores que se han sometido a controles de drogas en la ciudad han dado positivo en algún tipo de sustancia estupefaciente. Según los datos aportados por la Policía Local, entre el 1 de enero y el 31 de mayo de este año, se han realizado 53 controles de drogas con un resultado de 14 positivos, lo que representa el 26,4% de los conductores que se han sometido a esta prueba.La cifra contrasta con los resultados que arrojan los controles de alcoholemia. La Policía Local ha llevado a cabo en el mismo periodo de tiempo un total de 51 controles, en los que se han realizado 481 pruebas, con un resultado de 34 positivos, lo que supone un 7% del total.La Policía Local comenzó a realizar los controles a modo de prueba a finales del pasado año. En algunos casos lo hizo de manera conjunta con agentes del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil. Los controles se llevaron a cabo coincidiendo con las vacaciones de Navidad. La Guardia Civil lleva cerca de un año realizando este tipo de controles y pruebas. A partir de ese momento, los agentes de Policía Local realizaron cursos de formación específicos para obtener el certificado que les acredita para realizar estos controles. La mecánica de las pruebas de control de drogas siguen un proceso similar a las de alcoholemia, con la diferencia de que el resultado que arrojan no es definitivo, por lo que, en el caso de que dé positivo en algún tipo de sustancia, se deben enviar los resultados al laboratorio, donde se hace un análisis definitivo.Según explica el inspector de Atestados de la Policía Local, Javier Llorente, los controles se hacen de forma aleatoria, al igual que en los de alcohol. De hecho, las pruebas se pueden realizar en los mismos controles. Un conductor que ha dado negativo en la prueba de alcohol puede ser sometido a una de drogas. El agente puede estimar que el conductor presenta síntomas que indican que ha podido consumir alguna sustancia estupefaciente. El ‘kit’ de la prueba lleva una boquilla que se introduce en la boca del conductor para captar saliva. Existen unos niveles de color azul que determinan que se ha captado la saliva suficiente, lo que permite introducir la muestra en la máquina, que analiza y saca los resultados. Llorente apunta que esta prueba permite saber si el conductor ha consumido sustancias como el hachís, la marihuana, la cocaína, así como anfetaminas, metanfetaminas y otras serie de opiáceos.El inspector recuerda que se trata de un «test indiciario», por lo que debe dar positivo en una cantidad suficiente para posteriormente enviar la muestra al laboratorio. A diferencia de la prueba de alcoholemia, en la que en el caso de que el conductor dé positivo se le somete a un test que, si también es positivo, confirmaría la sanción correspondiente. En el caso del test de drogas, el agente redacta un boletín de denuncia a la espera de los resultados del laboratorio, que suelen tardar entre 7 y 10 días. En este sentido, los agentes deben cumplir con rigurosidad la cadena de custodia de las muestras extraídas, para que haya todas las garantías. Para ello, las dependencias de Policía Local disponen de un armario codificado con llaves en el que quedan registradas todas las aperturas y cierres. Esas llaves sirven para abrir el frigorífico en el que se guardan las muestras que después se llevarán al laboratorio.La multa por dar positivo en un control de drogas asciende a 1.000 euros de sanción económica y la retirada de seis puntos del carné.