50.000 víctimas de la crisis en manos de Cruz Roja
Mientras que en 2008, la ONG atendió a 21.000 personas, el pasado año fueron 49.500, el 13% de la población
La crisis ha dejado a miles de personas en la provincia burgalesa sin los recursos necesarios para vivir. Una realidad que se ha agravado progresivamente desde el año 2008 y de la que Cruz Roja es más consciente que nunca.Tanto es así que en la presentación de la Memoria de actividad de 2014 que la institución humanitaria realizó ayer, el coordinador provincial de la ONG, Ignacio Ángulo, aseguró que «el número de personas atendidas ha crecido un 137% desde el 2008 hasta el 2014, pasando de 21.000 personas atendidas a algo más de 49.500». Estas cifras ponen de manifiesto que «el 13,5% de la población burgalesa recibe ayuda de Cruz Roja». En comparación con el año anterior, la ONG también ha incrementado su atención «en un 5% más, ya que en 2013, se atendió a 47.000 personas en la provincia».En este sentido, son las personas afectadas por la crisis a quienes Cruz Roja dirigió gran parte de sus ayudas, un total de 28.826, mientras que «en el año 2013, las ayudas en este ámbito fueron 16.337, es decir, 10.000 menos». Unas ayudas cuya cuantía económica alcanzó «los 600.000 euros» pero «en la que no está integrada toda la ayuda entregada en productos», como explica la secretaria provincial de Cruz Roja, Concepción Pérez.Pago de recibos, ayudas al ocio, compra de material escolar o didáctico, retribución de los gastos de transporte o del alquiler son sólo algunas de los destinos del presupuesto destinado a ayudas a afectados de la crisis. A ello se suman, como comentó la secretaria, las ayudas en especie, entre ellos, productos alimentarios, material didáctico, productos sanitarios y de higiene, vestuario o juguetes.La institución humanitaria contó en 2014 con un presupuesto de 4,8 millones de euros, de los que «el 30% llegaron a través de las aportaciones de los socios y de los diferentes sorteos, como El Sorteo del Oro», explicó la secretaria. Una aportación, que «además se ha visto incrementada respecto al 2013 en un 15%»y es que Cruz Roja cada vez cuenta con más socios.Actualmente, 14.000 socios formaban parte de la ONG pero no se puede olvidar el trabajo de los 1.442 voluntarios que conforman el tejido humano de Cruz Roja en Burgos. «A pesar de la crisis hemos sido capaces de llegar a más personas gracias a esos voluntarios y a los socios y colaboradores con los que contamos», aseguró el presidente de la ONG, Arturo Almansa, quien describió a la sociedad burgalesa como «brillante, generosa y congruente».Tres ejes básicosAunque la institución humanitaria desarrolla su ayuda en múltiples ámbitos de la sociedad, durante el año 2014, «se incrementó la atención en tres ejes de actuación como fueron intervención social, empleo y formación», explicó el secretario provincial.El plan de intervención social, a través del cual se atendieron a 28.036 personas, se centra en los colectivos más vulnerables. «Infancia, mujer en dificultad, personas con discapacidad, inmigrantes, mayores, drogodependientes o afectados de VIH». Los datos reflejan «un incremento del 51% en este ámbito en cuanto a personas atendidas y es que mientras que en 2011 fueron 18.540, el pasado año, fueron más de 28.000». Es precisamente dentro de este eje, donde se ubica uno de los programas estrella de la ONG que se centra en la lucha contra la pobreza y la exclusión social y a través del cual «se prestó ayuda a más de 19.000 personas».En cuanto al empleo, en 2014, «participaron 1.205 personas en distintos cursos y hubo 279 inserciones, lo que supone un incremento del 31% en participación y un aumento del 27% en cuanto a la inserción, respecto al año anterior». Por último, en el ámbito de la formación existen varias líneas de actuación, formación para la intervención tanto para voluntarios como para personal remunerado, formación para la inclusión para mejorar la empleabilidad, para la población en general y para el desarrollo institucional destinado a mejorar la capacidad de los responsables de la ONG», explicó Angulo. Así, la institución contó con 4.219 alumnos, «un 28% más que en 2013» y se aumentó «un 3% el número de cursos y un 11% el número de horas de formación.Desde la ONG, aseguran que «aunque la situación va a mejor a nivel general, a nivel particular han persistido las consecuencias de la crisis». «Los primeros que entraron en el túnel de la crisis no serán los primeros en salir, sino los últimos porque eran los más desfavorecidos», apuntó el presidente.