Adúlteros al descubierto

BURGOS

Veintiséis burgaleses revisan estos días, preocupados, sus correos electrónicos y las publicaciones digitales. Disimulan, inquietos, confiando en que nadie se tomará las molestias de localizar por internet un incendiario archivo de más de diez gigas, descargarlo y hurgar en él a ver qué encuentra.

Salvo, claro está, que ese alguien, quizá alguna casada burgalesa, albergue ciertas sospechas y quiera confirmar si el email de su marido o su número de tarjeta de crédito figura entre los datos, públicos ya, de los más de 6.500 usuarios de pago españoles más muchas décenas de miles simplemente registrados en la web de citas para casados infieles que ha sido hackeada por el grupo Impact Team.

Eso en el caso de los usuarios de pago, que se calcula que son sólo una fracción ínfima del millón de españoles afectados por el robo de datos personales en Ashley Madison, la web para infieles más popular del mundo gracias a sus intensas campañas de márketing y publicidad.

A quienes pagan por ese servicio de citas se les presupone una determinación para llevar a cabo el adulterio ya que dan el paso adelante para pasar de la simple curiosidad por la web a tratar de contactar con alguien.

La mayoría de los usuarios estaban apuntados a esta página de encuentros pero sin pagar, disfrutando de las funciones gratuitas del servicio. Pero para ver fotos o contactar con otros usuarios se exigía el abono de unas cantidades periódicas.

Una gran mayoría de los adúlteros registrados en Ashley Madison, los de pago y los gratuitos, son hombres; a razón de casi nueve usuarios del sexo masculino de cada diez por uno que aseguraba ser una mujer, aunque en estos casos siempre se cuela alguna que otra sorpresa.

26 burgaleses de pago

Según diferentes fuentes, en la provincia había registrados en la web de Ashley Madison entre cinco y seis mil personas, dependiendo si se contabilizan o no perfiles duplicados o miembros inactivos de esa comunidad.

Pero este servicio para casados infieles tiene exactamente 26 usuarios de pago en la provincia de Burgos cuyos datos están ahora al descubierto.

La mayor parte, 18 en total, residen en Burgos capital. Otros tres están en Aranda; y hay uno en Miranda, Castrojeriz, Barrios de Bureba y Quintanapalla.

Gracias al hackeo de los datos de la web Ashleymadison.com se han desvelado datos personales de estas personas que pueden llevar a conocer, directa o indirectamente, información como su nombre verdadero y sus apellidos, el correo electrónico con el que se registró, la tarjeta de crédito o cuenta de PayPal desde la que realizó sus pagos y su dirección IP, la huella digital que dejan todos los ordenadores y dispositivos electrónicos con la que se podría conocer la ubicación de su domicilio o los datos de su teléfono móvil o tableta.

Además de las molestias conyugales que se puedan derivar de saberse sorprendidos, existen otros riesgos asociados a la divulgación de los datos personales y financieros después del ataque informático al servidor de la página web. Ésta y otras motivaciones asociadas al escándalo internacional que se ha producido han llevado al máximo responsable de la web a presentar su dimisión.

En Castilla y León, según diversas fuentes, la provincia de León podría albergar a la colonia más numerosa de adúlteros y en España, es claramente el litoral y las grandes ciudades donde más se citan los casados infieles.