Medio Ambiente
La provincia se compromete con el cuidado de nuestro planeta
Cada vez más municipios participan en el proyecto ‘Un bosque para el planeta Tierra’
Los más pequeños casi siempre son los más que se compromenten.-ECB
Por norma general, se tiende a pensar que las ONG’s están únicamente al servicio de las personas que más lo necesitan. Sin embargo, existen colectivos cuya razón de ser radica en prestar asistencia al entorno que nos rodea, en peligro de no retorno si nada hacemos por remediarlo. El proyecto Un bosque para el planeta Tierra no es ajeno a este fenómeno, ya que el bienestar terrestre depende en gran medida de los cuidados que hombres y mujeres dispensen al medio natural, fuente de vida por antonomasia.
La iniciativa es tan simple como compleja, establecer un trazado bosque a bosque para reforestar la casa de todas las especies. La provincia de Burgos es una de sus paradas y cada vez más municipios se adhieren a esta «nueva vía de comunicación plenamente natural», tal y como la definen sus integrantes en la página web de la entidad.
El presidente de la ONG y activista concienciado, Jorge Extramiana, se deshace en agradecimientos hacia las localidades, instituciones, asociaciones y particulares que han aportado -y aportarán- su granito de arena a un «proyecto muy ambicioso» que debe desarrollarse «de forma conjunta» para promover cambios efectivos a nivel global. Las últimas incorporaciones burgalesas se produjeron este verano. En concreto, la «bella ciudad medieval» de Frías, el «hermoso paisaje» de Quintanaseca junto al Ebro, Tobera «con sus cascadas» y el desfiladero del río Molinar.
Con anterioridad se sumaron, «haciendo las delicias de los senderistas y amantes de la naturaleza», buena parte de La Bureba -Oña, Salas de Bureba, Poza de la Sal y Hozabejas del Valle de las Caderechas-. También participa el Valle de Tobalina, cuyo Ayuntamiento suscribió un acuerdo de colaboración hace más de un año.
Los apoyos se multiplican a nivel local, regional e incluso internacional, desde el ámbito académico al institucional pasando incluso por alguna que otra entidad de corte monárquico. Léanse, por citar tres ejemplos de cada campo, Universidad de Burgos (UBU), la Junta de Castilla y León o la Fundación Princesa Kristina de Noruega.
Con más de cuatro años de trabajo, alrededor de 200 municipios adscritos y «ningún límite de actuación», Extramiana habla con pasión de África, una tierra tan castigada como solidaria donde la ONG trata de tender nuevos puentes en términos ecológicos a través de un acuerdo con el Instituto Jane Goodall España para propiciar intercambios culturales entre ambos continentes y desarrollar proyectos de diversa índole con fines que repercutan positivamente sobre su entorno natural.
En este sentido, el presidente de Un bosque para el planeta Tierra describe diversas experiencias que suponen «un beneficio para todos». Por ejemplo, durante un encuentro de hermanamiento con nómadas que viven del ganado, los voluntarios pudieron comprobar que «si se quedan sin pastos queman la selva», de ahí sus esfuerzos por inculcar «un cambio de mentalidad» a través de los mecanismos que brinda la educación ambiental.