Los funcionarios del Ayuntamiento quieren el mismo trato que el resto
Tomaron las escaleras y el hall del Cosistorio tras escuchar a Blasco al finalizar el pleno, que «es inasumible para la plantilla que tenemos» recuperar las 35 horas y los días propios
Los funcionarios del Ayuntamiento de Burgos cobraron ayer protagonismo en el Pleno Extraordinario donde el guión establecía como protagonista principal al edil de Cultura Fernando Gómez. En la primera intervención de Raúl Salinero empezaron a oírse las voces de ‘Carolina dimisión’. La respuesta dada en la última intervención de ruegos y preguntas a una representante de los funcionarios municipales no convenció a sus trabajadores. Tras una concentración en la Plaza Mayor convocada a las 11.30 y que reunió a más de un centenar de funcionarios, era el momento de escuchar.
La representante de los funcionarios preguntaron si «tras el cuerdo de aplicación del Real Decreto Ley 10/2015 del 11 de septiembre de 2015 de aplicación directa a los empleados públicos del Estado, y de aplicación en la Diputación de Burgos tras la mesa de negociación, ¿se va a aplicar en los mismos términos a los empleados públicos municipales?». La concejal de Personal, Carolina Blasco, aclaró que la devolución de la extra de 2012, los 91 días pendientes, se aplicarán con cargo al presupuesto de 2016. Pero que en cuanto a las 35 horas... «Con el dinero no hay problema en devolverlo porque hemos sido austeros, pero con el tiempo tenemos problemas porque con los efectos que tenemos hay que ofrecer los servicios que se deben dar a los ciudadanos» aunque aclaró que se devolverán de forma progresiva los días canosos.
La respuesta no era la esperada. La Diputación sí devolverá las dos horas y media y el rumor se extendió por todas las dependencias de la Casa Consistorial. Los funcionarios tomaron las escaleras de acceso al salón de plenos, sin entrar en él evitando así un desalojo por mandato del alcalde. Las protestas se dejaron sentir en las intervenciones del pleno extraordinario tanto es así que alguno de los intervinientes, como Raúl Salinero, se desvió de su asunto, perdió parte del tiempo asignado y se produjo un momento de confusión voces, Salinero y alcalde hablando al mismo tiempo...
fotos no
La tranquilidad no llegó a las oficinas municipales molestas no sólo por la falta de reposición de puestos y el aumento de la carga de trabajo sino por sentirse «menos que el resto de empleados públicos, ¿no aplicaron los recortes a todos al mismo tiempo?», se preguntaba una de las afectadas.
Al acabar el pleno los funcionarios volvieron a dejarse oír por toda la sede municipal. Los funcionarios gritaban en los pasillos, muchos de ellos se asomaban al mirador de cada una de las plantas que dan al hall principal. Golpeaban sus carpetas y archivadores contra la barandilla al mismo tiempo que exigían igualdad y la dimisión de la edil de Personal. Silbatos y gritos tomaron el ambiente de un Ayuntamiento cuyas oficinas estaban vacías. Una imagen que no pudo reproducir este periódico a pesar del intento de realizar una imagen de la protesta dado que, según el guardia de seguridad, «no están permitidas fotos a funcionarios». Un conflicto que, tras la aprobación de la norma estatal, ya auguraban los sindicatos de las administraciones públicas.