SUCESOS
Desmantelado un laboratorio de marihuana bajo techo
La Guardia Civil detiene a dos personas y se incauta de 124 plantas
La Guardia Civil ha detenido en el Valle de Mena a A.G.O. de 28 años y A.T.Z. de 24 años de edad, como presuntos autores de los delitos de tráfico de drogas, fraude eléctrico y falsedad documental. El registro domiciliario ha permitido desmantelar un importante laboratorio de producción indoor y suministro de marihuana.Las investigaciones se remontan al pasado mes de julio. Fuerzas del puesto de Villasana de Mena, en el marco de las actividades dirigidas a la prevención de la seguridad ciudadana en las urbanizaciones ubicadas en su demarcación, obtenían indicios suficientes para sospechar que en una de las viviendas se podía estar cultivando masivamente marihuana. Las sospechas se centraron sobre dos jóvenes, que habían alquilado un chalet en la comarca, y que si bien no residían en el mismo sí realizaban continuas y cortas visitas a la vivienda.En determinados días se podía percibir un fuerte olor característico de esta planta, cuyas emanaciones procedían del interior del domicilio, que por otra parte se encontraba aislado en una urbanización, para no levantar sospechas. En un dispositivo desplegado en una de las carreteras del Valle, era interceptado el vehículo que normalmente utilizaban en sus desplazamientos los sospechosos y que venía siendo sometido a vigilancias y seguimientos discretos.Un registro superficial al interior del maletero permitió descubrir e incautar 124 plantas verdes de marihuana de la variedad cannabis sátiva, transportadas en el interior de dos bolsas de plástico. En el unifamiliar, tras un registro autorizado, se localiza un laboratorio extremadamente sofisticado y preparado para el cultivo y elaboración sistemática y metódica de marihuana. Destaca la moderna y profesional instrumentación encontrada, permitiendo un perfecto aprovechamiento del espacio: en la planta inferior una habitación estaba destinado al cultivo de esquejes de la planta, mientras que en la planta alta eran dos las habitaciones utilizadas para el crecimiento y desarrollo de la droga. Estas estancias estaban preparadas y dotadas de extractores de aire, lámparas especiales de gran potencia, bombas de agua, sistemas de riego, filtros, ventiladores, material aislante, decenas de metros de cableado para instalación eléctrica, termostatos, ventiladores y toda la instrumentación y herramienta útil para el cultivo, elaboración y preparación de la droga.La instalación recreaba las condiciones de un invernadero, que hubieran permitido la recolección de al menos 4 cosechas anuales. Estas serían generosas en producción y calidad. Para camuflar el elevado consumo eléctrico y no levantar sospechas, habían manipulado la instalación, obteniendo la corriente eléctrica directamente del exterior, por lo que adicionalmente se les imputa un delito de fraude eléctrico.