SANIDAD
Las comparecencias de la comisión del HUBU empezarán en mayo
El PP sugiere a Tudanca que extienda su «excursión» a regiones gobernadas por el PSOE que aplican el mismo modelo de concesión
El «arduo trabajo» que deberá llevar a cabo la comisión de investigación del HUBU para elaborar las conclusiones impide augurar cuándo podrían estar listas. La falta de precedentes en la región de experiencias como esta obliga incluso a definir los pasos a dar. En ello trabajan ahora -con la vista puesta los procedimientos llevados a cabo otros parlamentos como guía- los letrados de las Cortes, que deben concretar hasta los detalles del modelo de citación de los llamados a declarar.
Así, el presidente de la citada comisión, el procurador del PP por Salamanca, Salvador Cruz, prefería no hablar de fechas límite. Si se aventuraba, no obstante, a estimar que las 56 comparecencias, acordadas el pasado 18 de marzo de las 214 propuestas, podrían comenzar en mayo.
Cruz compartía ayer en Burgos este ‘cálculo’ tras calificar la visita realizada el martes por los miembros de la comisión a las dependencias del centro en cuestión de «ejercicio de transparencia», definición que extendió a la aportación de toda la documentación exigida a la Junta sobre el contrato de concesión.
Respecto lo visto sobre el terreno, Cruz destacaba que, en su opinión como alguien que hasta ayer desconocía la realidad de las instalaciones, «los burgaleses pueden estar orgullosos del hospital que tienen». Tras la reuniones mantenidas con el equipo directivo del centro y los representantes de los trabajadores, el presidente de la comisión concluyó que el HUBU no solo no es un hospital privado, sino que su puesta en marcha «ha reforzado el peso de la sanidad pública en la provincia al permitir realizar pruebas que antes debían externalizarse», indicó.
Cruz arremetió contra el PSOE por considerar que su discurso crítico con el modelo de concesión es una «gran mentira» que «ha decaído» con el paso del tiempo. Reclamó en este sentido rigor y seriedad a los representantes de los distintos partidos implicados en la comisión. «No podemos hablar a partir de sensaciones. Tenemos que apoyarnos en datos y en evidencias. Que Burgos cuenta hoy con un hospital de última generación con profesionales de Sacyl al frente es un hecho objetivo», apostilló.
En la misma línea se manifestó el procurador burgalés Ángel Ibáñez, que también forma parte de la comisión y ejerció de ‘anfitrión’ en la ciudad de su compañero de filas. Ambos cuestionaron la presencia del secretario regional del PSOE, Luis Tudanca, en la visita del martes y le acusaron de querer «salir en la foto». Ibáñez se detuvo en la intención del socialista de reunirse con las consejeras de Sanidad cántabra y valenciana para conocer el proceso de reversión que han vivido centros de ambas comunidades. Al respecto, el ‘popular’ recomendó a Tudanca extender la «excursión» a otras regiones también gobernadas por el PSOE, comoAndalucía o Castilla La Mancha, en las que este modelo de concesión se usa en hospitales sin planes de dar marcha atrás.
Ibáñez defendía así, de nuevo, la decisión de la Junta para insistir en que «si no se hubiera apostado por esta fórmula ahora mismo la ciudad no tendría nuevo hospital».
Aseguró además que las reuniones mantenidas con el equipo directivo y los responsables de los doce servicios que visitaron el martes pusieron de manifiesto la situación ventajosa del centro burgalés frente a otros de la región ya que la empresa concesionaria está obligada «por contrato» a garantizar la reposición, el mantenimiento y la renovación de la tecnología puntera con la que el complejo está equipado. «El resto debe supeditarse año a año a la capacidad presupuestaria de la Administración para poder mejorar su equipamiento», señaló.
Por otra parte, Ibáñez indicó que la jornada dejó «claro» el control férreo al que está sometida la adjudicataria «que lo es solo de 14 servicios no asistenciales que también están externalizados en la mayoría de los hospitales del país».