El sector de la construcción se distancia de la recesión

Los últimos datos del paro han reflejado una ligera mejoría en el sector de la construcción. Una progresión en el empleo en la que han intercedido diversos factores, como la estacionalidad, es decir, el hecho de que durante el verano se incremente el empleo en el sector, pero especialemente, el crecimiento que ha experimentado el sector de las reformas y la rehabilitación de edificios, con una mayor demanda.

Según los datos recogidos por el Colegio de Arquitectos de Burgos, durante EL segundo trimestre del año se han solicitado 308 visados en la provincia burgalesa. De ellos, 191 fueron destinados a obra nueva, en concreto, 157 para viviendas y 34 para otro tipo de edificios, mientras que 117 fueron destinados a la reforma de edificios existentes, 21 para viviendas y el resto, 96, para otro tipo de edificios. En el caso de la edificación de nueva planta el presupuesto de ejecución ascendió a 35 millones, mientras que 7,5 millones de euros pertenecen a la reforma de edificios.

En este sentido, aunque tanto el sector de las reformas como el de vivienda de nueva planta han mejorado poco a poco, tal y como se recoge en los datos facilitados por el Colegio de Arquitectos, el visado de nueva planta ha experimentando un crecimiento reseñable desde el año 2013, momento en el que se tocó fondo una vez iniciada la crisis, con 261 visados. Ya, en el año siguiente, el número de visados solicitados en la provincia burgalesa ascendió a los 363 y en 2015 volvía a incrementarse hasta los 415. Ahora, en lo que va de año, el número de visados ya ha alcanzado los 241, lo que supone un 72% de los realizados el año pasado en estas mismas fechas.

Por otra parte y con la lupa puesta en el sector de las reformas, la tendencia que han venido observando las empresas del sector es que la gente se ha vuelto, sin lugar a dudas, mucho más precavida y es que al contrario que en el ámbito de la construcción donde la crisis llegó de golpe, siendo el periodo 2008/2009 el más crítico para el sector, en el entorno de las reformas y la rehabilitación, la crisis ha estado más amortiguada y desde hace dos años vive una etapa de crecimiento porque se ha preferido reformar la vivienda o el local, en lugar de meterse de lleno en un proceso de compra.

Así lo demuestran los datos, y es que en el año 2015 se realizaron 607 trabajos de reforma, lo que supuso un incremento de la actividad del 5,7% respecto a 2014, cuando hubo 400. La mayoría de estas actuaciones se refieren al ámbito residencial, 325, con el doble de obras que en 2014 y 2013. En lo que va de año, «se han desarrollado más trabajos de reforma que los que se hicieron el año pasado a esta alturas, lo que supone que el sector está mejorando poco a poco cada año», explica Vicente García, presidente de Asociación de Empresas de Profesionales de Reformas y Rehabilitación de Burgos.

«La gente se piensan mucho qué van a hacer, pero cuando contratan saben lo que quieren y hasta dónde quieren llegar con el dinero ahorrado, se huye de los préstamos, saben de forma muy concreta lo que quieren y lo que ese quieren gastar y piden varios presupuestos a distintas empresas para elegir el que más les convence», explica García, quien asegura que «muchas de las personas que necesitaban hacer obra en su casa, han esperado unos años para ahorrar y eso se ha notado estos años, cuando han ido perdiendo el miedo y se han animado a realizar la reforma, que por otro lado, ya no podían prolongar más en el tiempo, han esperado, aguantado por si acaso, y ahora se han decidido, igual que en los locales comerciales».

Algo similar ha ocurrido con los locales, el presidente de la asociación hace especial hincapié en los referidos a hostelería y es que «en los último meses se han abierto muchos nuevos bares que han apostado por realizar una reforma aprovechando lo existente». Otro punto clave en el sector de las reformas lo protagoniza la normativa municipal sobre el desarrollo de las Inspecciones Técnicas de Edificios así como las subvenciones a eficiencia energética. García recuerda que «las inspecciones sirven para informar a los vecinos del estado del edificio y lo que podría ocurrir en caso de no llevar a cabo una las mejoras necesarias».

En su momento, la crisis económica propició que muchas de esas comunidades de vecinos tan sólo asumieran las reparaciones básicas para pasar la ITC y no todos los arreglos que debieran, pero «la realidad es que son obras muy necesarias y un trabajo que está latente». En este sentido, García explica que el trabajo se centra «en la reparación de fachadas y tejados» y que «una vez hemos finalizado con los edificios más céntricos, estamos empezando con el resto de barrios, donde las comunidades son más grandes, con más vecinos, por lo que el gasto es menor para ellos».

EL SECTOR

El presidente de la asociación aseguraba hace un par de años que más del 50% de las reformas que se desarrollan en el país se hacían sin licencia. Ahora asegura que «se está mejorando en ese ámbito» y que, «cada vez más, los clientes optan por las empresas que pueden ofrecerles garantía de éxito y de calidad en la reforma de su hogar».

En este sentido, recuerda que «el sector está lleno de grandes profesionales que se han quedado en el paro y que han formado su propia empresa, por lo que la oferta es amplísima y el cliente tiene un amplio abanico donde elegir».

De cara a lo que queda de año, García asegura que es «optimista» y es que, «aunque el arranque del año fue un poco flojo a pesar de venir de un final de 2015 muy bueno, durante el segundo trimestre del año el trabajó ha aumentado y podemos decir que muchas de las empresas del sector tiene previsión de trabajo a corto plazo, cosa que hace unos meses no teníamos».

Aunque se muestra positivo, recuerda que «cada año es distinto al anterior» y que «cada uno tiene sus propias circunstancias, por ejemplo, el hecho de no tener un Gobierno estable provoca incertidumbre en la población y eso afecta en todos los ámbitos».