Repunta la cifra de viajeros del transporte público

El número de viajeros que utilizan el autobús urbano ha subido ligeramente durante los cinco primeros meses del año. Comenzó en enero del 2016 con 1.033.545 usuarios, y llegó a los 1.115.562 en mayo, es decir, casi un 8% más. Son datos facilitados por el Servicio Municipalizado de Movilidad y Transporte (Samyt), que indican que el uso del transporte público se mantiene estable.

Mientras que el primer mes del año es que el que menos cantidad registra, abril supera al resto, con 1.117.999 viajeros. Así, el resultado final que se ofrece es de un 0,72% más de incremento acumulado respecto al año 2015, en el que utilizaron el servicio del bus urbano 18.959 personas menos.

En esta comparativa las cifras varían dependiendo de los meses. En la mayoría son superiores, sobresaliendo de nuevo el mes de abril de 2016, con un aumento de 90.366 viajeros más que en el mismo periodo en el pasado año. Sin embargo, el mes de marzo de 2016 tuvo una caída de casi 67.000 usuarios, si lo comparamos con marzo de 2015, sin duda el mejor, ya que de 1.147.242 consumidores nos encontramos con los 1.080.584 del presente año.

Según Jorge Berzosa, concejal responsable del Samyt, considera que este aumento no es «especialmente significativo», pero que constata que se ha frenado la caída y que el número de viajeros está asentado. Aún así incide en que hay un «problema» a la hora de valorar de forma positiva o negativa las cifras, ya que en la movilidad de la ciudad no sólo está incluida un modo de transporte como el autobús urbano. «Esta mezclada con el transporte en vehículo privado, la peatonalización, o la bicicleta, y decir que el aumento es positivo o el descenso es negativo no es verdad».

Berzosa alude a la revisión del Plan de Movilidad Urbana Sostenible que se presentó el pasado viernes 8 de julio, con el que se pretende realizar un estudio durante 18 meses para hacer una remodelación de toda la ciudad. «Queremos conocer las causas, el origen y el destino de los viajeros, entre otras cosas», recalca el concejal, añadiendo que con los resultados obtenidos se establecerá un objetivo a 10 años vista sobre las líneas de autobuses y la movilidad en su conjunto, con la idea de potenciar el uso del carril bici y la peatonalización. «Lo que estamos provocando con eso es que disminuya el número de viajeros de autobuses. En función de los objetivos que pretendas, el que suban o bajen los usuarios puede ser negativo o positivo, y a lo mejor ese es nuestro objetivo en diez años, no que se incremente, sino que se disminuya».

En relación a las numerosas quejas acerca de la organización de las líneas de autobuses, reconoce que hay bastantes con «demasiada demora» y «poca frecuencia». Para solucionarlo vuelve a remitir al estudio que saldrá de la revisión del Plan de Movilidad Urbana Sostenible. «No se trata de modificar solo unas lineas, va a depender de muchos factores, cambian los flujos de personas y no se puede hacer con un pequeño ajuste a mano».

Por otra parte, el responsable del Samyt incide en que no es fácil saber cuáles son las causas de este ligero repunte, aunque una de ellas podría ser la mejora de la situación económica. «Es cierto que hay una mayor actividad económica y mas gente trabajando con el consecuente aumento de desplazamientos en la ciudad. Aunque la gente también se desplaza por ocio».

Asimismo Berzosa aporta como buena noticia la mejora a efectos de recaudación, que ha subido de igual manera que la cantidad de usuarios. Aunque se ha visto algo perjudicada por el reciente caso de las tarjetas de autobuses fraudulentas. «Por ahora está controlado, pero son viajeros contabilizados. Estamos teniendo reuniones para estudiar medidas de seguridad que eviten el hackeo y tenerlo en cuenta en el próximo contrato de renovación de las tarjetas, que será en abril del año que viene».