La UE aclara que sólo trató con Díez y que no reparó en las firmas falsas

La coordinadora europea de programas de movilidad, Renske Martijnse, confirmó ayer a una delegación del Ayuntamiento de Burgos que toda la gestión desde Bruselas de los programas subvencionados cuya tramitación desde Burgos se ha puesto en entredicho se realizó exclusivamente a través del responsable de la Asociación Civinet, José María Díez, que ha sido para la Unión Europea su único interlocutor.

Así se puso de manifiesto ayer en una reunión mantenida con el concejal de Movilidad, Jorge Berzosa, el portavoz socialista, Daniel de la Rosa, y el gerente del Plan Estratégico, Mario Sanjuán, en la que, según ha podido saber este periódico, Martijnse desveló que desde Bruselas se dieron por buenos los «7 u 8» documentos gracias a los que los fondos para los programas subvencionados acabaron desviados a la Asociación Civinet.

Esos son los mismos documentos que aparecían rubricados con la firma de la concejal Carolina Blasco y que la edil aseguró que «ponen de manifiesto la suplantación de mi autoridad en la toma de decisiones al ejercer ilegítimamente actos cuyo ejercicio me corresponde, así como un delito de falsificación de firma, algunas veces con aspiraciones de imitarla y otras, de manera totalmente burda que puede además dar pie a falsedad documental». De hecho, cualquiera que haya podido contrastar las firmas aprecia claramente el burdo engaño, pero los responsables de fiscalizar el cumplimiento de los programas europeos de movilidad subvencionados en Burgos nunca repararon en que las firmas de los documentos que se les enviaban desde Civinet eran diferentes entre sí. Ni siquiera realizaron una verificación de firmas, según quedó de manifiesto en la reunión de ayer.

Tanto es así que desde la UE se ha mantenido un contacto «normal y ordinario» con Burgos hasta este momento.

Pero también confirmó que todos ellos se ejecutaron «correctamente» en el plazo acordado y con las cantidades previstas.

Gestión ‘a su manera’

Días atrás la concejal responsable de Medio Ambiente, Carolina Blasco detallaba que «cuando la Unión Europea adjudica fondos vinculados a programas de este tipo a las ciudades elegidas, éstas deciden qué entidad los va a gestionar y en nuestro caso puede ser el Plan Estratégico, Civinet o los propios servicios municipales de manera directa. Puede pasar incluso, y así ha sido en alguna ocasión, que varíe según la fase a desarrollar del mismo programa».

La edil ya había sostenido en público que era descartable cualquier uso irregular del dinero pues «Europa lleva un control exhaustivo de las partidas que adjudica» y que «no tenía notificación previa» del gerente de la red de la petición que se iba a elevar a la UE y esa es una decisión «que solo puede tomar el Ayuntamiento».

Esa certeza, unida a que la propia UE reconoce -en boca ayer de la propia coordinadora de los programas- que los proyectos se ejecutaron como estaba previsto sin merma o desviación de los fondos, lleva a pensar, según varias fuentes municipales consultadas, que el gerente de la red Civinet, José María Díez, pudiera haber buscado la manera de aligerar la tramitación administrativa de los expedientes sin seguir al pie de la letra los cauces habituales sin que por ello se hubiera resentido ni la financiación ni la realización de los proyectos europeos de movilidad.

Esa conjetura se queda en el terreno de las hipótesis con las que se trata de explicar en la Casa Consistorial este enredo, ya que el propio gerente ha declinado dar su versión de lo ocurrido tanto a los medios de comunicación como ante el propio Ayuntamiento, debido a que, como aseguró a este periódico, se encuentra de baja en la actualidad aunque está en contacto con abogados para preparar su la documentación que apoya su versión.

Pese a las aclaraciones aportadas por Renske Martijnse, quedan pendientes de mayores explicaciones las preguntas que planteó el portavoz de Imagina, Raúl Salinero, quien insistió en crear una comisión de investigación, a la que el PP, de entrada, se opone, para determinar exactamente las responsabilidades que corresponden en este asunto y como afecta a la red de ciudades que participan de estos programas a través de Civinet. Además, propone extender las pesquisas a la Oficina de Captación de Inversiones, en la que también trabajó este técnico y propuso modificar los contratos con Europa para evitar nuevos ‘sustos’ en el futuro.