La provincia pierde más de 4.000 vecinos en una década
El censo ha bajado el último año en 2.804 personas Es la segunda provincia que pierde más residentes en la región donde más baja la población
La sangría de población en Burgos no cesa. Y tiene un DNI español más que Tarjeta de Identidad de Extranjero. Así se desprende de las últimas cifras de población que sitúan a la provincia de Burgos como la segunda de Castilla y León que más población ha perdido de la región que más vecinos ha tenido que decir adiós desde enero. Son 1.600 personas menos en seis meses y 2.804 personas menos las que residen en la provincia en el último año. Esta cifra supone más de la mitad de los vecinos que ha perdido Burgos en la última década.
A día de hoy, según las cifras del Instituto Nacional de Estadística, Burgos tiene 358.325 vecinos. Esto supone que ha perdido en el último año un 0,7% de los residentes ya que en julio de 2015 había 361.129 personas. Esta cifra ha caído un 1,2% en la última década donde lo que más se pierde es población joven, menor de 35 años y de nacionalidad española.
De esta manera, en la última década la mayor sangría de población residente en Burgos se ha producido entre los nacidos en España. Según los datos recabados por el INE en julio de 2016 había 326.319 residentes en Burgos con nacionalidad española. Esto supone que 2.112 se han marchado de la provincia en el último año y que 10.535 personas se han ido en la última década. En julio de 2015 la población nacional burgalesa ascendía a 336.854 personas.
Con estos datos queda claro que la pérdida de población no ha sido mayor en los últimos diez años gracias a la población inmigrante. En la última década se han sumado 6.347 personas más procedentes de otros países. Especialmente ha crecido la presencia de europeos, 21% más de países de la Unión Europea, un 46% más del resto de países europeos. También crece los latinoamericanos en Burgos (un 15% más los vecinos que han llegado a Burgos en la última década desde América del Sur y 1.254 más los llegados de Centroamérica). Crece también un 63% el número de vecinos procedentes de América del norte, un 29% los asiáticos y un 6,8% los residentes de Oceanía que apenas son tres más. En la misma década la población española residente en Burgos ha caído un 3%.
El descenso en el último año de población española no se ha frenado. El 75% de los residentes que ha perdido la provincia son de nacionalidad española que ascienden a 2.112 menos. En el último año, además hay 691 extranjeros menos puesto que también los vecinos de la Unión Europea, África y América del Sur se han ido de Burgos dejando un 4,6% menos, un 1,4% menos y un 0,9% menos de población de estos países en la provincia.
Menos jóvenes
Si tenemos en cuenta el perfil de la edad en la población burgalesa vemos donde más se pierde no es, precisamente, entre los más mayores. De esta manera la población que más desfase ha tenido en la última década y en el último año son aquellos que están entre los 25 y los 35 años. Según los últimos datos de población, la provincia cuenta con 42.014 personas en estas edades lo que supone un descenso del 5,3% en el último año (2.339 personas menos en esta franja de edad) pero una terrible caída del 30,5% respecto a julio de 2005 cuando residían en la provincia 60.475 personas con edades comprendidas entre los 25 y los 35 años. La segunda mayor perdida de población a una década vista es la de jóvenes entre 15 y 24 años. Hay 30.638 personas en esta horquilla de edades y suponen casi un punto menos que hace un año y 18,4% menos que hace 10. En cuanto a la comparación interanual la segunda franca de edad que más ‘efectivos’ pierde son los menores de 14 años que se sitúan en julio de 2016 en 45.006, 532 menos que hace un año aunque 2.232 más que hace 10.