MUNICIPAL
El bus urbano pierde hasta diciembre 100.875 usuarios
El descenso acumulado de pasajeros es del 0,89% con respecto al ejercicio anterior / Todavía se está lejos de la cifra récord de 2011 con 13.961.596 trayectos
Los autobuses municipales pierden hasta el mes de diciembre 100.875 usuarios comparados los datos del presente ejercicio con los del año anterior. Concretamente, entre enero y noviembre se subieron al bus 11.253.845 personas, cuando en el mismo periodo de 2015 fueron 11.354.720 los pasajeros en el conjunto de líneas que recorren el casco urbano de Burgos.
La variación a la baja en el porcentaje de viajeros no llega al 1% en los once primeros meses del año por lo que desde el Servicio de Accesibilidad, Movilidad y Transporte (Samyt) se considera que se ha estabilizado el número de usuarios con respecto a años anteriores cuando hubo caídas mucho mayores. A la vista de los pasajeros que se han subido mes a mes al autobús urbano es probable que el año termine superando los 12.300.000, muy cerca de los 12.437.042 del año 2015.
A pesar de haberse estabilizado el número de usuarios en cifras similares desde 2014 hasta 2016, con ligeras caídas del 1%, todavía se está lejos de los datos de 2011 cuando se batió un récord en el número de personas que se subieron al bus municipal durante aquel año.
Así, en los datos facilitados por Samyt, se observa como en 2011 se alcanzaron casi los 14 millones de viajes, concretamente un total de 13.961.596 pasajeros. A partir del ejercicio de 2011 fue cuando empezó la caída en el número de usuarios. Al año siguiente el transporte urbano perdió 589.209 usos al quedarse en 13.372.387. En 2013, la disminución de trayectos contabilizados fue todavía más alta ya que cayó en 639.321. Otros 300.000 pasajeros se perdieron entre los años 2013 y 2014, cuando el número total de usuarios se quedó en 12.469.128.
Por tanto, este descenso que se detectó entre 2011 y 2014 se achacaba, en buena medida, a la crisis económica. La disminución de la actividad económica provocó, por ejemplo, que menos viajeros necesitasen usar el bus para desplazarse a su puesto de trabajo. También en estos años se ha constatado que cada vez más personas utilizan la bicicleta para los traslados urbanos. A lo que no se puede achacar la disminución de pasajeros es a la tarifa del billete ya que se ha mantenido estable desde el pasado 2012, cuando se instaló el euro en el billete ordinario y los 45 céntimos para la tarjeta monedero.
En cambio, sí está prevista próximamente una subida en el precio del billete ordinario del autobús urbano, que pasará a costar 1,20 euros, ya que hubo un acuerdo entre PP y PSOE para modificar la ordenanza fiscal reguladora de la tasa por la prestación del servicio de transporte urbano de viajeros, aunque todavía no se ha aprobado definitivamente. Por tanto, la subida no será efectiva a 1 de enero. La principal novedad de esa normativa es que comenzará a aplicarse una tarifa para jóvenes (24 céntimos), muy demandada por este colectivo desde hace años. Mientras, el billete con tarjeta monedero se quedará en 47 céntimos.
Los datos de usuarios del servicio de autobuses indican que los meses de julio a septiembre son tradicionalmente en los que se registran menos viajeros, por debajo del millón que se suben al bus el resto de los meses del año. Además, durante este 2016 han crecido los pasajeros con respecto al año anterior en los meses de abril, mayo y junio, mientras que en el resto del año la diferencia ha sido a la baja.
Cuando se cierre este ejercicio ya se podrá conocer el número final de pasajeros que se han subido al bus durante este año, así como las líneas más utilizadas.
Para mediados del mes de enero, se espera incorporar los primeros seis autobuses que se han adquirido durante este ejercicio con cargo al presupuesto anual y a las inversiones sostenibles. Los dos minibuses ya han llegado y se espera que los cuatro autobuses lleguen entre esta semana y la próxima, según informa el concejal de Movilidad, Jorge Berzosa.