Cae una banda de delincuentes violentos que operaba en la provincia
La Guardia Civil destaca que se dedicaban a varios tipos de delito pero eran siempre violentos
En los registros se intervino droga y útiles para su distribución y trece armas simuladas o de aire comprimido.-
Una investigación de más de seis meses llevada a cabo por la unidad de Policía Judicial de la Guardia Civil ha permitido desarticular una banda ‘multidelicuencial’ compuesta por cuatro jóvenes que se significaron por la gran violencia empleada en cometer asaltos o robos y que también se dedicaban al tráfico de drogas.
La investigación se desarrolló bajo el nombre de Operación Falafel y combinó a efectivos de Burgos y Miranda detrás de las sospechas de la existencia de un grupo dedicado a la compra venta de droga, a robos y hurtos y que utilizaba de manera intimidatoria armas simuladas o auténticas y que era capaz de llegar a la violencia física. La primera pista llegó con la detención de uno de los integrantes en Las Merindades después de que fueran sorprendidos cuando sustraían un vehículo, desencadenándose una violenta y desproporcionada agresión contra su propietario y un familiar, que acabaron hospitalizados por graves lesiones.
A este individuo se le encontró encima una pistola ‘tasser’ para descargas eléctricas, que pudo usar en esa trifulca, de igual manera que la Guardia Civil sostiene que los integrantes de este grupo no dudan en usar la violencia física para obtener el botín o saldar cuentas o impagos, amenazando y agrediendo a los implicados o a sus familiares.
La investigación partió de esa base y se logró determinar que de este grupo integrado por S.K. (20 años), A.O. (23), R.D.C. (23) y E.D.C. (24), que sistemáticamente venía actuando en Burgos y la provincia, estaban relacionados con tráfico de drogas, sustracción de vehículos, robos con violencia/intimidación y hurtos al descuido. Las pesquisas practicadas durante meses evidencian las primeras sospechas; se consigue identificar a los cuatro integrantes, que carecen de ingresos por actividad laboral conocida, usan alias y poseen varios terminales de telefonía móvil, a nombre de terceras personas sin relación con la banda. Se desplazan a lugares de ocio con afluencia de personas; sustraen por la fuerza o al descuido pertenencias, teléfonos móviles o documentación usando su filiación para conseguir contratos en compañías telefónicas a nombre de terceros y sin vinculación con el grupo, dificultando su seguimiento, incurriendo en varios delitos de usurpación de estado civil.
En los registros efectuados se han intervenido 200 gramos de marihuana y semillas para cultivo, 20 gramos de hachís en bellotas, 2 básculas de precisión, picadoras y efectos para la venta y distribución de estupefacientes. Así como armas prohibidas como un táser, 13 armas (pistolas, revólver y largas) de aire comprimido y balines, 35 teléfonos móviles, 54 tarjetas de memoria, 13 tarjetas de teléfono de diferentes compañías, 2 ordenadores portátiles, 1 tablet, 2 cámaras fotográficas, llamando la atención un juego de ganzúas y tensores para apertura de cerraduras.