La caída de autónomos no cesa desde 2008

A pesar de que son muchas las voces que ya celebran una recuperación de la economía, la crisis sigue dando coletazos y golpeando, entre otros sectores, a los trabajadores autónomos de la provincia. Aunque es cierto que en los dos últimos años algunos trimestres sí han registrado ligeras subidas, la realidad general es que el número de autónomos sigue protagonizando una caída continuada desde el año 2008. Las cifras no acaban de despegar y, mucho menos, de acercarse a datos de antes de la crisis económica. Así lo demuestran los últimos datos recogidos por el Ministerio de Empleo. Durante el primer trimestre del año había registrados en la provincia 17.699 autónomos, de los cuales 11.880 son hombres y 5.819 mujeres. Si se compara con el mismo periodo del año 2016, el descenso es muy ligero, en aquel momento había en la provincia 17.792; 93 autónomos más, pero si se pone la lupa sobre el primer trimestre del año 2008, la caída es estrepitosa.Durante el primer trimestre de 2008, el número de autónomos era de 22.172; un año después se redujo hasta los 20.784. En el año 2012, la cifra ya había descendido de los 19.000 y tres años después, en 2015, el año empezaba con menos de 18.000 autónomos. Desde ese momento, aunque es cierto que algunos trimestres han registrado leves mejorías, la provincia sigue sin superar la línea de los 18.000 autónomos.Con el paso de los años, la radiografía de trabajador por cuenta propia ha permanecido igual en algunos aspectos pero ha variado en otro tantos. Un ejemplo se centra en los grupos de edad de los autónomos. El grueso se encontraba y se encuentra en una franja de edad situada entre los 40 y los 54 años. Actualmente 7.876 autónomos burgaleses están comprendidos entre esas edades, en 2008 eran 9.940.Sin embargo, aunque el descenso del número de autónomos ha sido generalizada en menores de 25, en el grupo de entre 25 y 39 años y en el de 40 a 54 años, las cifras se han mantenido en los mayores de 55 años. Mientras que en 2008 había 6.228 autónomos mayores de 55, ahora son 6.086. Por otra parte, si se observa la nacionalidad de los autónomos, llama la atención el descenso producido en los autónomos extranjeros, que se han reducido casi a la mitad en estos años. Mientras que en el año 2008, en la provincia había 1437 autónomos de otras nacionalidades, hoy son 883.Según la antigüedad, especialmente llamativo es el descenso en los autónomos con menos de seis meses de recorrido. Mientras que antes de que se iniciara el periodo de crisis, la cifra de autónomos con menos de seis meses de antigüedad era de 6.414; en el primer trimestre de 2017, el número es de 796. Precisamente en este aspecto, el mayor número de autónomos se sitúa entre quienes llevan más de cinco años con su negocio en funcionamiento, 12.040.Atendiendo al tipo de sector, el de servicios es el que acoge un mayor número de trabajadores por cuenta propia, 10.122 personas, aunque en el año 2008 la cifra alcanzaba las 11.334. Le sigue el ámbito agrícola, con 4.838, 1.434 personas menos que antes de que iniciara la crisis. Cierran la construcción con 2.079 autónomos, mientras que en 2008 eran 3.551, e industria con 660 personas, la mitad que hace nueve años. La situación profesional de los autónomos también es diferente. El número de profesionales que no contaban con asalariados a su cargo en el 2008 era de 18.574 personas, mientras que ahora es de 14.246. Lo que no ha variado, sin embargo, es el numero de autónomos con asalariados a su cargo, y es que mientras que en 2008 eran 3.598, en el primer trimestre de 2017, la cifra es era de 3.453.Base de cotizaciónUna de las decisiones que tienen que tomar muchos trabajadores por cuenta propia es elegir la base de cotización de autónomos. Hay que tener en cuenta que, en su mayor parte, los autónomos cotizan por la base mínima (893,10 euros). Aunque supone un desembolso menor, también menores prestaciones en caso de incapacidad temporal y para su futura pensión de jubilación. En este aspecto, de los 17.699 autónomos que hay en la provincia, el 83,2% c cotiza la base mínima.En cuanto a Castilla y León, de enero a marzo del presente año se registraron 127.418 autónomos, de los cuales 88.999 son hombres y 38.419, mujeres.La experiencia de trabajar por cuenta propiaSheila Macho tiene 30 años y en marzo de 2015 se lanzaba a la piscina del trabajo por cuenta propia. El sector escogido fue la hostelería porque «era lo que verdaderamente a mí me gustaba», comenta esta burgalesa. Desde ese año se encarga del Bar Chic en la calle Salamanca. «Decidí hacerme autónoma para cumplir mi sueño, de dedicarme a lo que me gusta, pero también por tener independencia absoluta, es decir, ser mi propia jefa , y para tratar de encontrar una estabilidad económica».Hasta ese momento Sheila trabaja de forma temporal en una fábrica «de la que entraba y salía constantemente». Ahora y tras casi dos años de experiencia como autónoma, Macho asegura que lo pero de lanzarse a esta aventura es «no tener un límite de trabajo, el sacrificio para tener resultados al principio es alto y, además, todo son trabas a la hora de lanzarte a poner en marcha tu negocio, pagamos mucho para jubilarnos por poco y lo que se paga por seguridad social por cada trabajador es una auténtica ruina».En el lado positivo señala «la importancia de trabajar en lo que amas, en mi caso además, disfruto con la atención al público, con las charlas con mis clientes».