El Consistorio acapara el 37,5% de las facturas pendientes de la región
Las facturas pendientes de pago de acreedores de la Comunidad, consignadas en la cuenta 413, ascienden a 31,4 millones de euros / 11,8 millones corresponden al Ayuntamiento de Burgos
Las facturas pendientes siguen llenando los cajones de los ayuntamientos y diputaciones de Castilla y León, que continúan acumulando gastos sin liquidez prevista para su pago. En términos contables: siguen tirando de la cuenta 413, de acreedores por operaciones pendientes de aplicar a presupuesto, que se infló tanto durante los peores años de la crisis y que obligó al Ejecutivo a poner en marcha el Plan de Pago a Proveedores en 2012.Un informe del departamento que dirige Cristóbal Montoro, recogido por Ical, constata que al cierre del año 2016, 83 consistorios y cinco instituciones provinciales debían a proveedores bienes por valor de 31,45 millones de euros, lo que supone un aumento del 9,2 por ciento respecto a 2015, o en términos absolutos, 2,64 millones de euros más.La mayor cuantía consignada en la cuenta 413 corresponde al Ayuntamiento de Burgos, con 11,8 millones de euros o lo que es lo mismo el 37,5% del total de la deuda, un 43% de la misma si se atiende a los 27,2 millones de euros que corresponden únicamente a los consistorios.En este sentido, el concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Burgos, Salvador de Foronda, destacó que «el Consistorio burgalés no tiene ningún problema de liquidez porque terminó 2016, con 65 millones de euros en el banco»; y defendió que «cada una de las partidas consignadas a la cuenta 413 tiene una explicación». Asimismo, aseguró que la cuantía que maneja el Ministerio de Hacienda «se debe aminorar en 800.0000 euros, porque son tasas de la compañía de aguas que consignaron equivocadamente al Consistorio».De Foronda aclaró, que la 413 incluyó la cuantía de dos pagos a la Junta de 2,2 millones de euros cada uno por el auditorio del Fórum, que estaban «afectos» a patrimonio municipal de suelo, y como no se vendió, se abonan a través de la 413.Aclaró además que se produjo una retención de la factura de cementerio por doce meses, porque «el gerente explicó que el contrato incumplía en cuanto al numero de trabajadores». Junto a éstas, también está la factura del final de autobuses y las retenciones de crédito de las inversiones sostenibles, que «había que cerrar a 31 de diciembre y como se habían hecho los contratos, pasan pero no se habían pagado», comentó el concejal.En la comunidadJunto al Consistorio burgalés, los ayuntamientos que consignaron mayores cuantías en la 413 fueron el Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo, 3,42 millones de euros; Salamanca, con 2,79 millones de euros; Palencia, con 1,24 millones de euros; Ponferrada, con un 1,33 millones; y Segovia, con 1,08 millones de euros. Las diputaciones estuvieron encabezadas por Valladolid, 2,29 millones; seguida de Ávila, con 1,81 millones; Salamanca, con 72.900 euros; Segovia, 48.079 euros y Burgos, 15.222 euros.