Paisaje soñado

Orbaneja del Castillo es un tesoro en sí mismo. Su alto valor paisajístico convierte a esta pequeña localidad burgalesa, en pleno Cañón del Ebro, en una visita imprescindible para este TrotaBurgos.

La provincia tiene mucha suerte de contar en su territorio con Orbaneja del Castillo para desterrar esa imagen que muchos turistas tienen de Burgos cuando se acercan por primera vez. Y es que aunque los campos de Castilla son extensos y agosto hace que predomine el color amarillo en esta tierra, lo cierto es que los valles del norte nos devuelven el verde, la naturaleza frondosa y el agua cristalina, aunque mermada en este seco verano.Así que una escapada a Orbaneja, al Valle de Sedano y a su Cañón del Ebro resulta ideal en esta y en cualquier otra época del año.La localidad sorprende al visitante desde la misma carretera ya que la cascada, que es sin duda, su lugar más retratado no espera y se muestra nada más llegar. En la época de lluvias, esos 25 metros de caída, resultan espectaculares, pero es en verano cuando da más envidia asomarse a ambos lados de la carretera y contemplar de un lado la cascada y de otro la poza de aguas cristalinas desde la cual continúa el camino que lleva al arroyo hasta el cercano cauce del Ebro.Cuando el espectador recupera el habla, tras contemplar esta maravilla de la naturaleza, llega el momento de ascender hacia el casco urbano para conocer de donde proviene la cascada. Así, llegar hasta la Cueva del Agua es la mejor excusa para recorrer las calles de Orbaneja y por que no, plantearse alguna de las rutas senderistas que desde allí parten.Si se sube desde la cascada podrá conocer el molino y poco a poco adentrarse en el pueblo donde destaca el buen grado de conservación de su arquitectura popular. Si decide seguir ascendiendo por alguna de sus empinadas calles podrá disfrutar del paisaje y las famosas formaciones kársticas, creadas por el efecto del agua desde hace millones de años. Merece la pena tomar fotografías desde el alto para tener la imagen de toda la villa, declarada Conjunto Histórico, el 3 de junio de 1993.Algún dato histórico de interés es que en esta localidad convivieron durante siglos mozárabes, cristianos y judíos. El pueblo actual se originó en la Edad Media y fueron los Reyes Católicos quienes concedieron a esta aldea el título de villa. Sus habitantes se dedicaron a la agricultura y también a la ganadería.Todavía se conservan en las eras del pueblo antiguos chozos que se utilizaban para guardar los aperos de labranza, es la zona más llana de la localidad y también la menos conocida. Los Templarios levantaron el Hospital de San Albín para atender a peregrinos que transitaban esta ruta como alternativa al camino francés.Desde Orbajena hay senderos señalizados para llegar a la vecina localidad de Escalada. Un pueblo que también merece la pena visitar, como otros del entorno y para los que ya se hace necesario el vehículo. Así, en las cercanías está Turzo, está Pesquera de Ebro y ya más cerquita de Burgos Covanera y su espectacular Pozo Azul.