Guerra fría sobre el futuro taurino del Coliseum

El futuro inmediato del Coliseum a nivel taurino se resolverá antes de finalizar el mes de octubre, según aseguran a este periódico fuentes del departamento de Instalaciones Deportivas del Ayuntamiento de la capital, órgano de quien dependen las materias taurinas en el Consistorio. En dos semanas, el equipo de gobierno hará pública su decisión sobre la petición de prórroga presentada por el actual concesionario días después de concluir la última feria de San Pedro y San Pedro.De la decisión que adopte el órgano de Instalaciones Deportivas dependerá el futuro taurino del Coliseum y el rumbo que adopte la gestión del coso burgalés de cara al próximo ejercicio. De momento, las posiciones se mantienen en tablas. Ni el Ayuntamiento ni el actual empresario -Carlos Zúñiga- han movido ficha y esperan decisiones cara a futuro.Las diferencias entre ambas partes son claras, ya que están distanciadas desde antes de comenzar la última feria. De hecho, el equipo municipal se abstuvo en la votación de aprobación de los carteles de San Pedro, lo que provocó las manifestaciones públicas del alcalde, Javier Lacalle, sobre su intención de convocar un nuevo concurso de cara al próximo ejercicio.Sin embargo, la posibilidad ejercida por el actual empresario de solicitar un año más de prórroga del contrato vigente, ha dejado en el alero el futuro inmediato del inmueble y su gestión taurina.Ambas partes mantienen sus posturas, según ha podido confirmar este periódico. La intención del Consistorio era haber resuelto la solicitud de prórroga el pasado mes de septiembre -época a la que siempre se trasladaban este tipo de decisiones, con excepción del curso pasado que se tomó en enero-, pero finalmente se ha retrasado a este mes de octubre.El Ayuntamiento mantiene firme su postura, según las mismas fuentes, de no prorrogar el contrato con el actual adjudicatario, si bien, la decisión deberá dictaminarse en el Pleno del Consejo de Instalaciones Deportivas. Otras fuentes consultadas apuntan a que la decisión no necesariamente debe pasar por el Consejo de Instalaciones Deportivas, y que la resolución podría tomarse directamente desde Alcaldía.Desde la empresa adjudicataria esperan la resolución municipal tras haber presentado su solicitud de prórroga en julio tras concluir la última feria. Compás de espera. La situación por tanto se asemeja a la vivida hace un año cuando se dilató la decisión del futuro taurino del coso hasta enero.De resolverse la solicitud de forma favorable a la prórroga, Carlos Zúñiga continuaría al frente del coso de la ribera del Arlanzón por cuarta temporada consecutiva, cumpliendo los cuatro años -dos de contrato y dos de prórroga-, que contempla el actual pliego de condiciones. En caso contrario, adoptando el Ayuntamiento la decisión de no prorrogar el contrato, el Consistorio se vería en la obligación de convocar un nuevo concurso de adjudicación -sexto que vivía la ciudad en la última década y octavo desde el año 2000-, cuyas bases y cuyo pliego debiera estar listo antes de finalizar el año, de cara a afrontar con garantías el nuevo curso taurino.