Farmacias y Junta se unen en la detección y prevención de casos de violencia de género

Todo acción es poca para acabar con la violencia de género y, sin duda, el trabajo conjunto entre administraciones y los diferentes actores sociales se torna fundamental para acabar con esta lacra que en diez años ha terminado con la vida de 713 mujeres. Precisamente en este sentido, los farmacéuticos de la región han realizado una formación específica en materia de violencia de género para convertirse, a partir de ahora, en agentes aún más presentes y activos en la lucha contra este tipo de violencia en la Comunidad a través de un convenio de colaboración firmado con la consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades.«Desde el colegio sentimos la necesidad de implicarnos en acabar con esta lacra y ayudar a aquellas mujeres que padecen violencia de género», comenta el presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Burgos, Miguel López de Abechuco, quien añade que «queremos conformarnos como un puente entre las mujeres y la Administración, como un espacio de confianza donde puedan contar por lo que están pasando».Psicólogos de la Dirección General de la Mujer han sido los encargados de formar a los profesionales farmacéuticos en diversos ámbitos vinculados a este tipo de violencia como cuáles son las pautas que permiten detectar los signos y síntomas de los malos tratos, cuáles son los protocolos de actuación que debe seguir el farmacéutico en estos casos y qué información debe ofrecer sobre los recursos existentes a los que pueden acudir las víctimas. Una aprendizaje que se prevé reforzar con formación online a disposición de todos los colegiados.«No debemos olvidar que tenemos una situación privilegiada para impulsar iniciativas así, somos el punto sanitario más cercano al ciudadano, cada día pasan por las farmacias burgalesas 20.000 personas», explica el presidente.