Agrolab dispone de dos meses para formalizar la compra ante notario
El consorcio de Villalonquéjar ya ha comunicado a la multinacional alemana que le adjudica la parcela 24 y la ha retirado del catálogo de venta / Invertirá 2 millones en equipamiento y otros 4 en el edificio
Burgos
La multinacional alemana Agrolab ya ha sido formalmente notificada de que su oferta por la parcela 24 del polígono de Villalonquéjar ha sido aceptada por el consejo rector del consorcio que gestiona la compraventa de terrenos en la cuarta ampliación del parque industrial y se le ha comunicado que dispone de dos meses de plazo para formalizar la operación y firmar el contrato ante notario.
A partir de ese momento, tendrá vía libre para desarrollar el proyecto con el que optó a la compra de la parcela y que prevé la construcción de un edificio con un desembolso de cuatro millones de euros y la adquisición e instalación de equipamiento para desarrollar su actividad por valor de dos millones de euros, una cifra elevada que da idea de la especialización de la labor que desarrollan este tipo de empresas dedicadas a los servicios de analítica.
En el caso de la nueva sede de Agrolab en Burgos, sus principales tareas serán las de análitica para el sector de la alimentación en diferentes grados de sofisticación, así como las analíticas agrarias, medioambientales, de aguas residuales, lodos de depuradora
Agua potable, agua mineral, aguas freáticas y superficiales, radioquímica o comprobación de principios activos microbiológicos, entre otras tareas. Además, las nuevas instalaciones contarán con oficinas y zona logística.
El propio director general de la empresa, Paul Wimmer, confirmó que la nueva instalación de Burgos asumirá los trabajos que actualmente se realizan en uno de los laboratorios del grupo en Kiel, en Alemania, el moderno centro de institutos de LUFA-ITL que cuenta con una superficie de laboratorios de alrededor de 6.000 metros cuadrados y que es propiedad de Agrolab desde 2002. Esta inversión supone, según Wimmer, una apuesta para «aumentar el negocio» del grupo en España.
La plantilla se muda
Según se deduce de la memoria justificativa de la oferta que Agrolab presentó al consorcio para pujar por la parcela, los 25 empleados que actualmente trabajan en el laboratorio de la firma alemana en la calle López Bravo, 15, también en Villalonquéjar, se trasladarán a las nuevas instalaciones cuando estén finalizadas a mediados de 2019.
En dicha memoria, la empresa adelantaba que en una primera fase se contará con una plantilla de 150 o 160 trabajadores, entre los que estarían incluidos los que ya trabajan en Burgos. En un segundo momento la plantilla se ampliaría a 200 personas que, dado el tipo de trabajo que desempeña esta empresa, serán profesionales de alta cualificación, lo que significa que la inversión que llega a Burgos no sólo supone una enorme inyección de empleo sino que éste será de gran calidad. En ese sentido, cobra valor el hecho de que esta inversión acaba llegando a Burgos después de que la dirección de la empresa en Baviera recelara de la situación política en Cataluña y derivase a Burgos esta inversión que estaba prevista para Tarragona, donde Agrolab factura más de seis millones de euros al año.
La parcela que va a adquirir Agrolab está situada en el extremo más oriental de la cuarta ampliación del polígono de Villalonquéjar, en las proximidades de Villator. Consta de 8.034,74 m2 en un solar de forma rectangular con salida a la calle Valle de Tobalina, justo detrás de las naves de la empresa Logibur, en una zona en la que sólo hay otra empresa más: Desmesa. En cambio está fácilmente comunicada con la ronda de circunvalación noroeste desde la que se puede acceder a cualquier destino.
La idea que maneja Agrolab, tal y como confirmó Paul Wimmer por carta a la plantilla de Tarragona, es que las obras puedan comenzar en septiembre una vez solventados los trámites de licencias, de forma que las nuevas instalaciones se puedan inaugurar en mayo de 2019.