SUCESOS
Roba 100.000 euros durante 10 años en la casa en la que trabajaba
Agentes La Policía Nacional ha detenido a J.D.L.C.T. de 57 años de edad, con domicilio en Burgos, por un presunto delito de hurto. La víctima había comunicado tiempo atrás a sus familiares, que en el testamento había dejado como herederos a la familia, y debido al extremo estado de salud de la perjudicada los mismos realizaron un seguimiento de las cuentas bancarias, detectando en los últimos años la existencia de movimientos exagerados de cantidades de dinero, los cuales no correspondían con la vida que llevaba la enferma.
La señora debido a un estado de salud bastante delicado, además de ser invidente y teniendo que acudir al hospital tres veces por semana, había contratado hacía 10 años a una mujer para que la asistiera en su domicilio dos horas diarias, siendo su función atenderla en el hogar y trasladarla al banco y a las compras.
Los familiares comenzaron a sospechar de esta persona, poniéndola un cebo en la caja fuerte, donde la propietaria guardaba su dinero en efectivo. Con motivo de uno de sus ingresos hospitalarios, guardaron en la caja 3.000 euros, verificando días más tarde que faltaban 1.300 euros, sospechando de la trabajadora ya que la única persona que tenía llave de la caja era la víctima, pudiendo la detenida haber hecho una copia de la llave y aprovechando la ausencia de la víctima realizaba los hurtos. Los agentes investigadores de la Policía Nacional, procedieron a la detención de la sospechosa, reconociendo en dependencias policiales que durante los diez años que llevaba contratada en ese domicilio, había estado sustrayendo pequeñas cantidades de dinero, de 10 a 50 euros diarios.
Según la detenida los hechos que la motivaron a realizar los hurtos fueron una serie de préstamos que había contraído por diferentes motivos y que mensualmente envía dinero a su país de origen para sufragar los préstamos. Estos hechos fueron verificados por los investigadores que localizaron dos locutorios desde donde enviaba el dinero, ascendiendo la cuantía en el año 2017 a 7.400 euros. Según el estudio de la documentación bancaria, la policía sospecha que la cantidad hurtada superaba ampliamente los 100.000 euros.