Fuentes Blancas estrena imagen pero tardará 2 años en recuperar el verdor

El espacio que acoge la zona de toboganes y de juegos infantiles del Parque de Fuentes Blanca inaugura nuevo aspecto tras la rehabilitación municipal de 18.000 metros cuadrados del parque burgalés. La intervención ha tenido un coste de 238.222 euros, de los cuales el 30% se ha destinado a la colocación de nuevo mobiliario de juego infantil y un 25% a la mejora de la zona de toboganes- uno de ello de 18 metros, diez de ellos cubiertos- en la falda de la ladera. Instalaciones infantiles y toboganes que «se han adecuado a los requisitos de seguridad de la Junta de Castilla y León», tal y como explicó ayer la alcaldesa accidental, Carolina Blasco, en su visita al parque.El resto del presupuesto se ha destinado, «no solo a actuar sobre el terreno con una mejora de la red de abastecimiento y equilibrado del terreno», sino a la modificación del mobiliario con la instalación de seis nuevos cenadores, dieciséis nuevas mesas, diez papeleras, cuatro contenedores y el cambio de 515 metros de talanqueras. «No es una actuación para generar nuevas zonas verdes sino para mantener las que ya tenemos, de ahí nuestro deseo de seguir trabajando en la mejora del parque», apuntó la popular.Precisamente a tenor del mantenimiento de estas zonas verdes, la alcaldesa accidental recordaba que deberán transcurrir al menos dos años para que los burgaleses disfruten del verdor que caracteriza al espacio y es que, por el momento, el terreno no tiene hierba. «Se hizo la pertinente siembra con dos tipos de césped, pero sabíamos que tenía que pasar un ciclo completo para que el espacio cuente con el verdor que todos deseamos», comentó y avanzó que «se hará otra siembra a finales de octubre para que el año que viene empiece a verse hierba y otra más adelante para que en dos años el espacio recupere el aspecto anterior». La popular recordaba, eso sí, que «nunca se ha pretendido que este espacio sea un jardín, sino un espacio naturalizado».A través del proyecto se ha actuado también en una veintena de árboles ubicados detrás de los toboganes. «Aunque no es una zona de competencia municipal, alguno estaba muy deteriorado y podían generar algún peligro».Tras esta primera fase de rehabilitación del pulmón verde de la capital burgalesa el objetivo del equipo de Gobierno es «seguir avanzando» para desarrollar un proyecto global sobre todo el parque. Las actuaciones pendientes se dividen en dos proyectos concretos. El primero de ellos abarcaría el espacio ubicado entre el camping y la zona situada frente a los toboganes- al otro lado de la carretera- donde la idea pasa por «renovar el mobiliario, mejorar el terreno con caminos y el arreglo del carril bici e instalar cenadores y mesas».«Estamos redactando el proyecto para conocer el importe de la actuación que podríamos asumir y ver si podríamos desarrollarlo el próximo año», señaló Blasco quien tendía la mano al resto de grupos políticos para su desarrollo. «Deberemos llegar a acuerdos para que estos proyectos puedan seguir desarrollándose».El segundo proyecto se centra en el espacio conocido como Fuentes Blancas Norte, ubicado al otro lado de la playa y que colinda con Capiscol. Precisamente este proyecto «ya está redactado e igualmente necesita de acuerdos de acuerdos políticos».PARQUE DE SAN ISIDROA las quejas lanzadas por algunos vecinos de la zona sur sobre el estado del Parque de San Isidro, la alcaldesa accidental aseguraba que «no será hasta dentro de diez años cuando se vea un parque verde» y aseguró que «el mantenimiento se está realizando»- recientemente se ha segado la zona para evitar posibles incendios-, pero «los técnicos entendieron que hasta ahora ha sido conveniente dejar que esa zona creciera para que fuera creándose suelo».A través del Plan de Empleo Municipal «se dará continuidad a las labores de mantenimiento del parque durante el verano» y «se están retirando las pintadas vandálicas que han aparecido en la pista de skate».