Vecinos denuncian que vehículos pesados siguen usando la calle Cortes
Tras siete meses de quejas «no se ha hecho nada» / «Hay una señal que prohibe su circulación»
El pasado mes de febrero, vecinos de la calles Cortes e Inés Suárez en el Barrio del Crucero denunciaban que las vías se habían convertido en un continuo ir y venir de autocares y de camiones que transportan escombros hasta la planta de reciclado, ubicada junto al vertedero municipal. De esta forma, los vehículos, en lugar de transitar por la BU-11 hasta el barrio de Cortes, se desvían por la calle Cortes.A pesar de haber elevado sus quejas a la Policía local y siete meses después, la situación no solo sigue igual sino que «ha empeorado», tal y como señala Juan Manuel López, vecino del barrio. «Últimamente se han sumado a esta ‘procesión’ de vehículos, camiones de recogida de basuras que se dirigen a los puntos de reciclaje, provocando una suciedad constante en nuestras viviendas».López señala que los vehículos con más de cinco toneladas de peso están incumpliendo el código de circulación y es que una de las vías acoge «una prohibición expresa de circulación de esos vehículos en forma de señal». Afirma que esta práctica «reiterada» está destrozando el firme de una carretera que «no está preparada para soportar tantas toneladas de peso de algunos camiones».Al margen del deterioro de la vía, el vecino recuerda que «ni uno solo de esos camiones cumple con la normativa que les obliga a llevar la carga tapada con el fin de evitar caídas de cascotes y polvo, un polvo que todos los días de viento a ido a parar a nuestras ventanas». En este sentido, critica que «la Policía local hace caso omiso a nuestras quejas» y «tampoco hace cumplir las normas de circulación».Esta situación no es nueva y es que el paso de camiones con escombros «también se produjo durante varios meses el año pasado, cuando se desarrolló el derribo de las antiguas casas de los empleados de Renfe y tuvimos que soportar todo el polvo de las cargas de los vehículos sin tapar», asevera y apunta que «el objetivo es hacer fuerza con todos los vecinos de la zona para poner fin a esta situación, que no solo conlleva destrozos en el firme y suciedad, sino problemas de inseguridad en la circulación y el movimiento peatonal».