Herrera pone deberes y apunta a que se sumen los vinos portugueses
La Federación de Hostelería pretende que Burgos sea la sede permanente, pero Herrera no se moja
BURGOS
El presidente de la Junta puso ayer deberes a los organizadores del primer festival bienal internacional del vino, que se desarrolla por iniciativa conjunta del sector y la consejería de Agricultura, para que, en primer lugar den «continuidad» a un encuentro que «era necesario organizar» para seguir fortaleciendo el «gran proyecto de los vinos del Duero», de Castilla y León, «de los grandes vinos de calidad en España».
Para lograr ese objetivo el presidente de la Junta puso deberes a los organizadores del encuentro de cara a la próxima edición porque, en su opinión, «es muy importante», recalcó Herrera, «saltar fronteras» y se establezca una «enorme hermandad, cercanía y fortaleza» con «los grandes vinos del Douro de nuestros hermanos de Portugal». Un acercamiento que «también nos enriquece a nosotros», defendió antes de presidir el homenaje a un grupo de históricos bodegueros en el congreso ‘Duero Internacional Wine Fest’, que estos días convierte a Burgos en ‘capital mundial del vino’.
Sin embargo, Herrera no se moja sobre la sede que debería acoger este evento bienal y deja que sean los organizadores quienes decidan que se vuelva a organizar «allá donde entendáis que deba hacerse», contrariando las expectativas de la Federación de Hostelería de Burgos -impulsora del proyecto con su iniciativa de los Palacios del Vino- que plantea que la provincia sea la sede permanente de este encuentro sobre el vino.
En su intervención ante especialistas y aficionados al mundo del vino venidos de toda la región, para esta cita que se desarrolla estos días en el Fórum Evolución de la capital burgalesa, el presidente de la Junta recalcó que en una tierra como la nuestra «vertebrada» por el Duero, que es «uno de los grandes ríos vitinícolas del mundo», se contabilizan 14 figuras de calidad, de las que 13 son Denominaciones de Origen Protegida (12 en torno al Duero, más El Bierzo), lo que representa 50.000 hectáreas y supone el 86 % del total de la producción vitivinícola. En total, el sector vitivinícola de Castilla y León contabiliza 650 bodegas, 75.000 hectáreas de viñedo y 19.000 trabajadores (de los cuales 15.000 son viticultores). Según ha destacado el presidente, todo ello moviliza un volumen de negocio de 1.000 millones de euros, y lo convierte en el primer sector agroalimentario de Castilla y León en exportaciones.
Herrera se apoyó en las cifras para rematar el apoyo de su Gobierno a este sector afirmando que una cuarta parte de las ventas de «vino de calidad» en el mercado tradicional en España proceden de Castilla y León, por detrás de La Rioja.
El «magnífico momento que vive el sector vitivinícola de Castilla y León» culmina el enorme «protagonismo» que ha ejercido al frente de lo que Herrera calificó como «una de las mayores transformaciones» que ha sufrido a lo largo de los años la Comunidad y no solamente en el mundo agrícola.