sucesos
La policía venezolana mata a tiros a los 4 asesinos del empresario burgalés
Sergio Santamaría, dueño una librería en Ojeda fue asesinado para robarle
BURGOS
Quien a hiero mata, a hierro muere. Los cuatro autores de la muerte a tiros del empresario burgalés Sergio Santamaría murieron abatidos por la policía venezolana durante un tiroteo ocurrido el pasado miércoles en el sector Los Dulces de la carretera Lara-Zulia del municipio de Cabimas. Se trata de la misma zona en la que estos peligrosos individuos asaltaron al empresario natural de Celadilla Sotobrín para robarle su Toyota Avalón.
Precisamente a los cuatro individuos han sido identificados por la policía venezolana como pertenecientes a la banda de ‘Los Toyoteros’, dada su especialización en el robo de estos vehículos japoneses. Sergio Santamaría, de 79 años, fue víctima de esta banda el viernes día 8 cuando recibió los disparos de cuatro encapuchados que intentaron robarle el coche y que también hirieron a su chófer en el municipio Simón Bolívar de Venezuela. Santamaría, que murió dos días después, el domingo pasado, era dueño de la librería San Agustín, en Ciudad Ojeda, enclavada en la zona de actuación de esa banda de ‘Los Toyoteros’, que, según un portavoz policial que cita el diario venezolano Contraste, mantiene en zozobra a los habitantes de la zona por los constantes robos que se registran en las carreteras, que se convirtieron en su centro de operaciones.
Los cuatro delincuentes circulaban a alta velocidad por esa carretera cuando trataron de eludir a los policías que les dieron el alto y se estrellaron con su Caprice contra unas rocas. De inmediato comenzó un intercambio de disparon y los cuatro ‘antisociales’ como los define la prensa local, fueron heridos por los agentes de policía a las 3:30 de la tarde de este miércoles y murieron después en el ambulatorio rural III El Lucero. En el lugar de los hechos los agentes hallaron dos revólveres, una pistola y un rifle pertenecientes a los delincuentes.
La policía los ha identificado como Franklin Antonio Rosales, Hugo Enrique Rodríguez, Carlos Segundo Rodríguez y Jonar González, todos entre 27 y 37 años. Las autoridades venezolanas investigan para determinar si los tres primeros son hermanos, ya que tienen el mismo apellido, pero los vinculan sin lugar a dudas con la peligrosa banda de ‘Los Toyoteros’.
Sergio Santamaría estaba casado con una ciudadana chilena, tenía tres hijos, y llevaba varios años viviendo en Venezuela.
El alcalde de Celadilla-Sotobrín, José Luis Riocerezo, ha indicado que aunque llevaba más de diez años fuera, primero en Chile y luego en Venezuela, seguía muy en contacto con el pueblo, que solía visitar con cierta frecuencia.