El Correo de Burgos

CAMPAÑA ELECTORAL 28-A / 26-M

Herrera entona el ‘mea culpa’ por el retraso del Parque Tecnológico

Defiende el «empujón definitivo» a una de las «obligaciones autonómicas pendientes»

Alejandro Vázquez, Ángel Ibáñez, César Rico, Juan Vicente Herrera, Lorena de la Fuente y Javier Lacalle, ayer, en el Paseo de la Audiencia.-RAÚL G. OCHOA

Alejandro Vázquez, Ángel Ibáñez, César Rico, Juan Vicente Herrera, Lorena de la Fuente y Javier Lacalle, ayer, en el Paseo de la Audiencia.-RAÚL G. OCHOA

Burgos

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El todavía presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, se despide de la primera línea política con una espina clavada: el parque Tecnológico de Burgos. Se trata de unas de las «obligaciones autonómicas pendientes» que requieren un «empujón definitivo». Y aunque «afortunadamente ya se han reanudado las obras», el líder regional no quiso escurrir el bulto sino todo lo contrario. Según sus propias palabras, no se puede «sentir orgulloso» de «haber culminado» el proyecto durante su mandato.Tampoco se olvidó Herrera de otras actuaciones que tomarán «cuerpo» durante los «próximos años» como el futuro hospital de Aranda de Duero, que poco a poco va dando sus «primeros pasos». Por otro lado, destacó el papel que ha jugado la Junta tras la «desindustrialización» de Miranda de Ebro -por culpa de la «crisis» y del «caprichoso cierre de Garoña»- al favorecer el asentamiento de «nuevas industrias» que están «llenando de actividad» polígonos estratégicos como el de Ircio. No en vano, consideró que sus compañeros del Partido Popular deberán tener en cuenta las actuaciones «pendientes» en la ciudad.En lo que respecta al tejido empresarial como motor para fijar población, el presidente autonómico puso el foco sobre Burgos, donde la industria y la agricultura «se dan la mano como en ninguna otra provincia». En su opinión, el Gobierno resultante de las urnas tras las elecciones generales tiene la obligación de defender ante Bruselas los «intereses» del campo regional a la hora de negociar la reforma de la Política Agraria Comunitaria (PAC). De igual manera, instó al próximo Ejecutivo a garantizar la «inexorable» transición energética respetando no solo los «compromisos y plazos» con Europa, sino también la capacidad de adaptación de una «industria fundamental» para Castilla y León como es la de la automoción.Pese a los «positivos» avances en materia de infraestructuras durante los últimos años, Herrera tampoco pasó por alto un proyecto que la ciudadanía burgalesa está «necesitando y esperando desde hace demasiado tiempo»: la llegada definitiva de la Alta Velocidad. De nuevo, reconoció que los retrasos no entienden de colores políticos concretos, ya que en este caso tanto socialistas como populares tienen una responsabilidad compartida. No en vano, se mostró partidario de «culminar» cuanto antes.Si de algo está convencido Herrera es de que tanto España como Castilla y León encaran una legislatura «muy importante» y con «muchos asuntos pendientes». Entre ellos, la previsiblemente «dura» negociación para la reforma del modelo de financiación autonómica. En este sentido, manifestó que la configuración del próximo Gobierno de la nación será «clave» para determinar la «gestión» de «grandes servicios públicos» por parte de las comunidades autónomas como la «sanidad», la «educación», los «servicios sociales» o la «atención a la dependencia». Y es que más allá de las «buenas calificaciones» que hasta ahora ha recibido el Ejecutivo regional, lo que se necesitan son «recursos para poder mejorar las cosas».-Más información en la edición impresa-

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