Alertan de la «normalización» del consumo juvenil de cannabis

El director de Fundación Candeal Proyecto Hombre en Burgos, Manuel Fuentes, abandonaba ayer su tradicional cautela para mostrar la gran preocupación que reina en las organizaciones del sector ante el «adormecimiento de la sociedad ante un problema real y serio como es el consumo de drogas y alcohol». Así de rotundo se mostraba, para detenerse en ejemplos «significativos» como el hecho de que la gran mayoría de menores beba con asiduidad «y un porcentaje importante de las familias lo tolere». «Sabemos que es el trampolín de salida hacia situaciones que generan un grave daño», subrayó.

Fuentes hacía esta valoración tras desmenuzar los datos de actividad de Proyecto Hombre en 2018, año en el que la entidad atendía a 283 jóvenes. El grueso, un 80%, llegaban por una adicción al cannabis, ‘combinada’ además en dos tercios por un consumo abusivo de alcohol. Sin registrarse un incremento llamativo reciente, a largo plazo el aumento de este perfil sí es «realmente alarmante», afirmaba Fuentes. «Se ha ido extendiendo y normalizando el consumo de cannabis y hay que recordar que es una sustancia perturbadora del sistema nervioso, que afecta a la memoria y a la voluntad, puede provocar brotes psicóticos y por estas razones ha de considerarse como lo que es: un problema de primer orden», detalló. Y no solo en los jóvenes. Si bien el grueso de los 479 adultos que el año pasado demandaron la ayuda de Proyecto Hombre lo hacía por su adicción a la cocaína (35%), casi la mitad también consumían cannabis y el 60% alcohol. Cabe destacar en este sentido que la sustancia ‘principal’ en un 20% de los casos era heroína.

Hecha la ‘radiografía’ del trabajo realizado, Fuentes resaltaba dos mensajes. En primer lugar, especialmente vinculado con la labor con adultos, explicó que «lo ideal es evitar que estas personas lleguen a un grado de severidad importante pero aún en esos casos con tratamientos intensivos pueden recuperarse a pesar de las recaídas, con las que los que trabajamos en esto contamos, y merece la pena». En relación con los menores, en los que también esta entidad ha detectado una dependencia al alza de las nuevas tecnologías -aspecto en cuyo tratamiento fueron pioneros-, el director de Proyecto Hombre en Burgo llamaba a reforzar la prevención para lo que solicita «multiplicar» los fondos públicos. En 2018 llegaron a 3.219 personas en este ámbito, en el que trabajan tanto en el consumo de sustancias como en el uso de dispositivos o el juego y las apuestas. «Cada vez vemos más casos y hay que tener mucho cuidado con la proliferación de estos negocios y su ubicación», indicó Fuentes.

En 2018 la entidad registraba 227 altas terapéuticas, 156 a jóvenes y 71 a adultos. «Se otorgan solo cuando el problema está verdaderamente resuelto, somos muy exigentes», apostilló.LA FIESTA SOLIDARIA DEL XIX DÍA DE LA BICI, EL 19 DE MAYODice el refrán que un grano no hace granero pero ayuda al compañero. Así, sin ser una cuantía determinante en el presupuesto anual próximo al millón de euros de Proyecto Hombre, los más de 20.000 que recaudaron en la última edición del Día de la Bici suponen una especial «satisfacción» para la entidad. Y es que más allá de nutrir distintos programas de tratamiento y prevención ‘encierra’ la solidaridad de los burgaleses con su labor.

Al alcanzar al menos esa cifra -lograrlo o incluso superarlo dependerá mucho del termómetro- aspira la próxima cita, que tendrá lugar el 19 de mayo. «Es una marcha solidaria más que instaurada y muy querida que busca también lanzar mensajes de promoción de hábitos saludables», recordaba Manuel Fuentes, director de la agrupación promotora.

La ruta partirá a las 11.30 de La Antigua de Gamonal y cruzará la ciudad hasta El Parral. El dorsal cuesta tres euros y puede adquirirse en los establecimientos Ciclos García, Bike Xtrem, Deportes Manzanedo, TecniSport, Vikings, Al Límite Bicis, Más Bici, MadHouse e Idiomática.