El fiscal aplica la doctrina del Supremo sobre ‘la manada’ a los exfutbolistas y pide de 39 a 40 años
Les acusa de dos delitos de agresión sexual a menor de 16 años, otro contra la libertad sexual y un cuarto de agresión sexual continuada / Sigue la instrucción del Supremo pide cárcel por cooperación necesaria
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La pena máxima. 40 años de cárcel para uno y 39 para los otros dos. Son las penas a las que se enfrentarán los tres exjugadores de la Arandina en el juicio por la violación de una niña de 15 años en Aranda de Duero en 2017. La Fiscalía burgalesa asume la valoración del Tribunal Supremo a raíz del caso de ‘la Manada’ de Pamplona en la que recalca que lo correcto habría sido condenar a cada acusado por su propia violación y, además, por cada una de las violaciones de sus cuatro compañeros en concepto de cooperador necesario.
En el caso de Aranda, la Fiscalía Provincial de Burgos considera que el principal responsable es Raúl Calvo por lo que solicita para él una peña de 15 años de cárcel, ya que le atribuye un delito de agresión sexual a una menor de 16 años, que en su caso califica de continuado. El fiscal parte de la base de que la menor «fue obligada a mantener relaciones sexuales con todos ellos en el salón de la casa, para seguidamente ser de nuevo obligada por Raúl Calvo a soportar otra relación sexual en un dormitorio de la vivienda».El fiscal considera, por tanto, que Raúl Calvo tuvo un papel principal en el caso de la menor arandina y pide para él un año más de prisión que para los otros dos acusados, los exjugadores de la Arandina Club de Fútbol, Carlos Cuadrado alias ‘Lucho’, Víctor Rodríguez Ramos ‘Viti’. A éstos, siguiendo las instrucciones del Supremo, los considera colaboradores de la violación de la que acusa a Calvo y les pide 12 años de prisión por ese delito. A mayores les acusa de ser autores de sendas agresiones sexuales a la menor, por los hechos que «sucedieron en el salón de la casa», donde supuestamente fue obligada a realizarles una felación, y solicita que se les imponga una pena añadida de 14 años de cárcel a cada uno por esos delitos.El Ministerio Público asegura en su escrito de calificación que todo lo que ocurrió en la calle Santiago de Aranda en septiembre de 2017 estuvo planeado por los futbolistas, ya que los tres procesados mantenían contactos telefónicos y a través de redes sociales, principalmente WhatsApp, desde septiembre de 2017, con la menor de edad, a quien conocían con anterioridad. Señala expresamente que «sabían la edad que tenía» y puntualiza que esas conversaciones tenían por objeto «convencerla para que tuviera relaciones sexuales con ellos».
El 24 de noviembre de 2017, la menor acudió al domicilio de los procesados y, según el relato del fiscal, fue allí «donde después de una conversación, fue obligada a mantener relaciones sexuales con todos ellos».
Además, el fiscal señala que cada uno de los tres exfutbolistas es autor de un delito contra la libertad sexual por el que solicta que les les imponga una pena de un año de cárcel.
40 y 39 años.En total, a cada uno de los acusados se les imputan 4 delitos, tres de agresión sexual de los que dos les corresponden como colaboradores necesarios y uno como autores, puesto que cada uno mantuvo relaciones sexuales con una menor de dieciséis años y contribuyó a que los otros dos las mantuvieran, y un cuarto contra la libertad sexual de la menor.
En su escrito de calificaciones previo a la celebración de juicio oral el fiscal refleja una petición de penas que suman 40 años de cárcel para Raúl Calvo y 39 años cada uno para Carlos Cuadrado alias ‘Lucho’, Víctor Rodríguez Ramos ‘Viti’. En la misma línea irá el escrito de calificaciones de la acusación particular, que ejerce desde Valladolid la Asociación Clara Campoamor y que aún no se ha formalizado a la espera de la postura de la Fiscalía. Por la defensa de los acusados solicitaba la libre absolución o, en el peor de los casos, que se les aplique el tramo más bajo de la catalogación de penas para un delito de abusos sexuales, penado con menos carcel, y por un máximo de cuatro años, argumentos que recogerá en su escrito dirigido a la Audiencia.Para los tres futbolistas el Ministerio Público reclama las penas más altas previstas en el Código Penal basándose en su artículo 183 que establece que «cuando el ataque consista en acceso carnal por vía vaginal, anal o bucal, o introducción de miembros corporales u objetos por alguna de las dos primeras vías, el responsable será castigado con la pena de prisión de ocho a doce años, en el caso del apartado 1, y con la pena de doce a 15 años». El mismo artículo en su apartado segundo señala que «las mismas penas se impondrán cuando mediante violencia o intimidación compeliere a un menor de dieciséis años a participar en actos de naturaleza sexual con un tercero o a realizarlos sobre sí mismo».
Alejamiento
Adicionalmente, la fiscalía solicita medidas de alejamiento de la menor para los tres procesados que abarcarían un total de 42 años en el caso de Raúl Calvo y de 41 años para Carlos Cuadrado alias ‘Lucho’, Víctor Rodríguez Ramos ‘Viti’. En ese plazo tendrán prohibido acercarse a menos de mil metros de la niña, su domicilio o colegio o cualquier otro lugar.En su escrito de calificación el fiscal reclama una indemnización conjunta y solidaria por parte de los tres acusados de 50.000 euros a la menor «a través de sus padres» para reparar «el daño moral causado». También en este caso la Fiscalía carga la acusación contra Raúl Calvo a quien exige además que indemnice «individualmente» a la niña «en 20.000 euros, más intereses legales».
Para el juicio oral se ha solicitado, que la vista se celebre a puerta cerrada para proteger a los menores que intervendrán en el proceso.Juicio en septiembre
El padre de la menor denunciante baraja que el juicio contra los tres procesados pueda tener lugar la semana del 6 de septiembre, aunque será la Audiencia Provincia quien finalmente marque el señalamiento. «Para nosotros cada día es una pesadilla. Solo queremos que termine y que podamos recuperar la dignidad y la autoestima», asegura el padre de la víctima, quien solo espera que se haga justicia y que termine una pesadilla en la que su hija se ha visto envuelta. «Llevan 16 meses riéndose de todo el mundo», lamenta indignado porque mientras los jugadores hacen su vida y Lucho sigue jugando al fútbol, su hija continúa en tratamiento psicológico, ha sufrido bullyng en el colegio y se ha quedado sin amigas. En el plano escolar, la joven no se vio con fuerzas para realizar los exámenes de junio por lo que tiene todo el curso para septiembre y no se sabe si tendrá que repetir.En la calle tampoco lo tiene fácil, según el padre quien reconoce que «hay mucha gente que nos apoya pero siempre te quedas con los cuatro que tocan las narices», explica molesto porque los insultos y los actos vandálicos que han sufrido han salido gratis. La familia ha denunciado que les pintaron su buzón y rayaron su puerta, entre otros actos vandálicos. «Es tremendo», zanja. Y es que, desde que salió a la luz la denuncia, en diciembre de 2017 su vida se ha parado. «Esto ha afectado a todos, a mi hija por supuesto, pero a nosotros como padres, a los abuelos, a las hermanas… nos han destrozado».