Las carreteras registran 4 muertes en accidente entre julio y agosto

La campaña de verano de Tráfico se cierra con un notable descenso de las víctimas mortales en accidentes en las carreteras de la provincia respecto al año anterior.Entre los meses de julio y agosto se registraron 4 muertes en accidente de circulación, frente a los ocho fallecido durante el mismo periodo del pasado año. Unas muertes que se produjeron en julio, tres de ellas en días consecutivos.

La primera víctima se produjo el pasado 7 de julio. Un joven búlgaro de 26 moría al chocar contra un árbol en la carretera que une las localidades de Fuentelcésped y Santa Cruz de la Salceda.El accidente se produjo en torno a las 2.45 horas.

El 19 de julio fallecía el conductor de un camión en la antigua autopista AP-1 cuando se salía de la vía y volcaba en la subida del puerto de la Brújula, en el término municipal de Monasterio de Rodilla. Tras el vuelco, la cabina cayó sobre el arcén y provocó la muerte del conductor, de 50 años. Un día después, el 20 de julio, moría el conductor de una motocicleta en tras sufrir un accidente en el kilómetro 22 la carretera BU-550. Otro motorista moría el 21 de julio tras una salida de vía y chocar contra una bionda en el puerto delEscudo, en el término municipal del Valle de Valdebezana. En lo que va de año se han registrado 7 fallecidos en carretera.

La liberalización de la autopista AP-1 ha influido en el descenso de la siniestralidad en la N-I, la vía que más accidentes mortales registraba. De hecho, el último accidente mortal que se produjo en esta vía fue hace más de un año, el 8 de agosto de 2018, cuando dos jóvenes gallegos morían arrollados por un camión en Quintanapalla. El conductor del vehículo articulado dio positivo en alcohol.

Los datos de siniestralidad de los meses de julio y agosto cierran un periodo en el que Tráfico había puesto su foco en el corredor de la antigua AP-1, conscientes de que la liberalización del peaje iba a incrementar el flujo de vehículos. En este sentido, el jefe provincial de Tráfico, Raúl Galán, señala que «nos ha preocupado especialmente el corredor de la AP-1 y de la N-I», aunque no ha habido accidentes especialmente graves. La eliminación del peaje de la antigua autopista ha permitido ganar en seguridad, pero los servicios que ofrece ahora la autopista, sobre todo los días en los que sube la intensidad del tráfico, hacen que «supere la capacidad» de la vía para asumir ese flujo de vehículos. Se trata de una carretera con«pocas salidas» y cuando hay ahora un accidente, aunque sea leve, al haber más intensidad de tráfico se generan más retenciones. Antes se daban este tipo de situaciones, pero «al haber menos intensidad de tráfico eran menores». En este sentido, el jefe de Tráfico indica que los agentes del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil están de«forma permanente» para gestionar lo más rápido posible este tipo de situaciones.

La última operación especial de tráfico, desarrollada entre el 30 de agosto y el 1 de septiembre, se saldó con cuatro accidentes con víctimas, aunque ningún fallecido. Según la información facilitada por la Subdelegación del Gobierno, se produjeron cuatro accidentes con víctimas, con el resultado de un herido grave, que tuvo que ser hospitalizado, y 5 heridos leves. Las mayores intensidades se registraron en la tarde del viernes 30 de agosto, alcanzando los 2.860 vehículos/hora y sentido en las principales vías de la provincia, A-1, AP-1, A-231 y A-62.

Uno de los fines de semana que se esperaba que pudiera haber problemas en la circulación era el del 24 y 25 de agosto, coincidiendo con la celebración de la cumbre del G-7 que se celebraba en Biarritz (Francia).Finalmente, no hubo problemas de circulación, ya que los conductores particulares y, especialmente, los transportistas,«hicieron caso de los avisos», lo que hizo que fuera un fin de semana sin problemas de circulación.