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El «increíble» viaje de Dabiz Riaño por Europa del Este se prolonga hasta diciembre

El ELA no impide a este joven mirandés seguir exprimiendo cada minuto al máximo para dar forma al documental ‘7 lagos 7 vidas’

David Riaño disfruta de lo lindo en cada baño.-PHOTOGRAPH OR

Burgos

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Se ha bañado en unos 30 lagos desde que inició su «increíble» y largo viaje por Europa del Este el pasado mes de junio. El científico mirandés Dabiz Riaño, diagnosticado de esclerosis lateral amiotrófica (ELA) al poco de hacerse con una plaza titular en el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) sabe que cada segundo es oro y no está dispuesto a desaprovechar el tiempo que le queda. 

En lugar de resignarse por culpa de esta cruel enfermedad, decidió luchar contra todos elementos y lanzarse a la carretera en compañía de dos grandes amigos: Rubén, más conocido como Or, y Capi. Tal y como esperaba, la experiencia está siendo inolvidable y aún le quedan muchos chapuzones en aguas lejanas.

Seguirá de ruta hasta diciembre. Después recorrerá España mientras el documental 7 lagos 7 vidas empieza a tomar forma. Con esta cinta, acompañada de una banda sonora a cargo de artistas y grupos que colaboran desinteresadamente, pretende concienciar al mundo sobre la necesidad de avanzar en la investigación contra el ELA y lanzar un mensaje de optimismo a quienes se encuentran en su misma situación.

Desde Eslovenia, donde se encuentra actualmente, Dabiz reconoce que la experiencia está colmando de pleno sus expectativas. La aventura le está permitiendo conocer a «gente con habilidades extraordinarias» que le hacen sentir vivo a todos los niveles. 

Durante su periplo, no solo se ha cruzado con otras personas afectadas por el ELA o por distrofia muscular. También ha tenido la suerte de conocer a seres humanos maravillosos como Maia y Alberto, viajeros sin rumbo desde hace cuatro años e integrantes del grupo Mala Polka. O aquel hombre que en Cracovia (Polonia) «me miró a los ojos y me dio un abrazo» mientras «cantaba en la calle» con Or y Capi.

Aunque cada baño tiene su encanto, Dabiz recuerda con especial cariño su inmersión en el Adriático. A esta escapada se sumaron Alba y Jorge, dos amigos de Burgos dispuestos a darse un chapuzón inolvidable. «Llovía a mares» de camino a la zona que consideraban más propicia, y aunque les costó lo suyo dar con el enclave idóneo, seguían empeñados en cumplir su objetivo. De repente, como si el mar les estuviese esperando, «dejó de llover» y disfrutaron de una apacible temperatura de 20 grados en unas aguas que afortunadamente «no estaban muy frías».

Aparte de los lagos previstos y los que aparecen sin previo aviso, el proyecto documental de Dabiz pretende dar a conocer su historia entre las autoridades españolas de distintos países. Las embajadas de Estonia, Polonia y Eslovenia ya les han recibido y los diplomáticos conocen su resiliente y concienciadora propuesta. 

La próxima parada, probablemente, será la embajada de Albania. El país no goza últimamente de muy buena prensa internacional debido a la agresión sufrida por unos turistas españoles a manos de un hostelero que no encajó demasiado bien las críticas. Poco les importa este hecho aislado a Dabiz y compañía. De hecho, le «motiva más» si cabe la visita, máxime cuando es la propia embajada la que contactó con él dado su interés en 7 lagos 7 vidas. Además, tendrá la oportunidad de presentar su proyecto ante alumnos de Cine, Medicina y personas que sufren distrofia muscular.

En el ecuador de su viaje, Dabiz y sus dos inseparables compañeros del Komando T (de Tullido) se tomaron unas ‘vacaciones’ de seis días. El «impás» se debió a la boda de una prima de Dabiz en la que se presentó «por sorpresa». Obviamente, su familia le recibió con los brazos abiertos y emocionada a más no poder porque «no se esperaban la visita».

Su vuelta a casa coincidió con una noticia demoledora: el fallecimiento de Jesús Gómez, presidente de la Asociación de Esclerosis Lateral Amiotrófica de Castilla y León (ELACyL). Abatido por la triste pérdida, aprovechó su estancia en tierras burgalesas para dar el pésame a sus seres queridos antes de partir de nuevo hacia Europa del Este. Por otro lado, el parón le vino muy bien de cara a «coger fuerzas para poder continuar».

Sin prisa pero sin pausa, disfrutando de cada encuentro y de cada anécdota, Dabiz sigue su camino sobre la marcha, sin una hoja de ruta previamente planificada. Si algo tiene claro es que el futuro documental ya cuenta con «muchísimo material». Lo que se ha recogido hasta ahora es «interesante y divertido». A la hora de grabar, contaron en un primer momento con el apoyo del cineasta José Luis López-Linares, artífice de «seis cortos sobre los 10 primeros días».

Dabiz espera «seguir grabando como se pueda» de aquí hasta la línea de meta. Después, tratará de «buscar financiación» y plataformas para que el documental tenga la mayor visibilidad posible. Entretanto, aguarda expectante la banda sonora, que ya cuenta con siete de las 12 canciones previstas en formato «maqueta». 

«Si sale el disco antes mejor, lo importante es que la gente lo escuche», confiesa este joven e inquieto luchador al que le gustaría organizar un concierto con todos los músicos involucrados con su causa. Lo único que le da rabia es que se perderá la grabación de su LP en directo, el 28 de septiembre, de Contrabandeando en Alcalá de Henares. Más que nada porque interpretarán su aportación a 7 lagos 7 vidas proyectando imágenes del viaje.