ECONOMÍA
Adeabur inicia la revisión del censo oficial de talleres
Ha iniciado contactos con la Oficina de Industria de la Junta y la Cámara de Comercio para cruzar listados
Poner el sector en orden. Es el objetivo que persigue la nueva acción de la Asociación de Empresarios de Automoción de Burgos (Adeabur). La organización ha iniciado contactos con la Oficina Territorial de Industria de la Junta de Castilla y León y la Cámara de Comercio para «cruzar nuestros datos con los oficiales y elaborar un censo actualizado», explica el secretario general de Adeabur, Gabriel Martínez.
La iniciativa que «está en fase inicial» busca «plantear soluciones al control de los negocios legales y definir, mediante un censo cruzado, los que se han transformado, para actualizar sus datos, añadir las jubilaciones, traspasos, traslados o ampliaciones que se han regularizado». De esta manera se busca tener un censo fiel a la realidad de los talleres hoy en día que el actual censo oficial no cumple. «No ha habido rigor en la actualización del censo y queremos ponerlo en orden. Al tener datos por tres vías distintas, sabremos los que están y luego iremos revisando uno por uno los negocios que presentan dudas», explican desde Adeabur.
En la actualidad existen un total de 420 talleres en la provincia de Burgos que emplean de manera directa a entre 1.200 y 1.500 personas a los que se añaden aquellos trabajadores autónomos que se ponen el mono en el taller y que podrían alcanzar los 600. De esta manera el sector genera cerca de 2.000 empleos directos a los que habría que sumar los dedicados a suministros y compraventa.
De fondo a esta intención de actualizar el censo de negocios está la necesidad de estrechar el cerco a quienes no cumplen la ley. Su denuncia de explotaciones ilegales de talleres es constante. Se han detectado hasta 40 actividades que no cumplían las normas. «Hay algunos reincidentes, hay quien acumula tres o cuatro expedientes pero ninguna multa y vuelve a abrir», denuncia Martínez. Por eso desde la organización empresarial demandan que «igual de exigentes que son con las aperturas de nuevos establecimientos, que nos parece correcto, lo sean en la aplicación de expedientes que inician los cuerpos de seguridad del estado sobre estos negocios ilegales».
En la actualidad hay ocho talleres de este tipo que «presentan signos de ilegalidad o hay reservas en un desarrollo correcto de la actividad» que están bajo investigación. Desde Adeabur denuncian que hay ubicaciones bajo edificio de viviendas, junto a otros talleres que sí cumplen las normas de seguridad y «son un verdadero peligro». De esta manera consideran que «hace falta una labor contundente para que la administración regional, nacional y local competente finalice esos expedientes iniciados por el Seprona o la Policía y establezca sanciones y multas». En cuando a los ciudadanos, Adeabur recuerda que «cuando lleven su coche al taller el local debe tener una placa distintiva de industria donde acredita su especialidad». Eso garantiza que se cumple con las medidas de seguridad industrial, medioambiental, de formación del personal y será transparente fiscalmente y a afectos de presupuesto de reparación, calidad y emisión de factura. Añade que «los talleres legales tienen una garantía del arreglo de tres meses y 2.000 kilómetros».