El PSOE encaja las enmiendas de Cs para que vote sí

Burgos

El PSOE y Ciudadanos tienen muy cerca las posturas para llegar a un acuerdo para aprobar los presupuestos del Ayuntamiento el mes que viene. Los socialistas ya tienen sobre la mesa las enmiendas planteadas por la formación naranja, que quiere que las  asuman en exclusiva para dar un voto positivo a las cuentas para que así Cs pueda defender estos presupuestos como suyos, lo que le permitiría ejercer una labor de control del equipo de Gobierno para que cumpla sus compromisos. 

El grupo municipal de Ciudadanos llevaba ya tiempo preparando las propuestas al borrador de los presupuestos del PSOE, conscientes de que, como ha señalado en alguna ocasión su portavoz, Vicente Marañón, «no nos quieren, pero nos necesitan». Ese interés táctico es sobre el que ha fundamentado Ciudadanos las negociaciones entre los dos grupos, con encuentros periódicos que en los últimas semanas han sido casi a diario, según confirma David Jurado, concejal de Hacienda, que forma parte del equipo negociador del PSOE con la formación naranja. 

El trabajo está tan avanzado que, tal y como señala el secretario provincial de Programas, Lorenzo Rodríguez, el documento con los planteamientos de Cs está ya en manos del PSOE, tal y como confirmaba ayer Jurado. Un documento que conoce José María Espejo, responsable nacional de Acción Institucional de la gestora de Cs, persona con la que Rodríguez habla en su condición de secretario provincial de Programas. 

Es el portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento, Vicente Marañón, el que está al frente de estas conversaciones con el PSOE, que está evaluando las enmiendas presentadas por la formación naranja. Ese documento se analizaría por parte del grupo municipal y Rodríguez, y tras comprobar que no contraviene los fundamentos políticos deCiudadanos y se elevaría a los órganos superiores del partido para la firma.

 

Según explicaron fuentes de la negociación, no hay grandes novedades en la propuesta de Cs para el borrador del presupuesto sobre los asuntos que la formación naranja ha venido reclamando desde junio, sin embargo prefieren no enunciarlos para no entrar en un debate de puerta afuera sobre los tiras y aflojas de la negociación.

Ambos partidos anticiparon a este periódico que «hay voluntad», por lo que se «puede llegar a un acuerdo». Si bien no es menos cierto que Cs pretende cierta exclusividad en el pacto con el PSOE, ya que si éste incluye enmiendas del PP o de Vox, Ciudadanos no lo bloquearía, siguiendo el criterio que ha planteado la formación naranja desde que se conoció el borrador del presupuesto, pero muy probablemente se abstendría en la votación. 

«No hay fisuras»

Ciudadanos votaría en bloque, «no hay fisuras» en el grupo municipal, explica Rodríguez.  Está unidad de acción se justifica, según el secretario de Programas, en que una ciudad «tiene que tener presupuesto». Argumenta que«en el trabajo de los concejales sobre cuestiones concretas de la población hay que dejar la política a un lado y mirar por los intereses de la población y de los vecinos».

Fuentes de la dirección nacional de la formación naranja consultadas por este periódico señalaban que la decisión sobre los presupuestos del Ayuntamiento de Burgos estaba coordinada desde Burgos con la dirección regional y con la nacional. Estas mismas fuentes indicaban que se trata de «una estrategia que se adoptará estos días», habida cuenta de que Rodríguez está supervisando la negociación y tiene informado al máximo responsable orgánico de Castilla y León, Luis Fuentes, y a Madrid.

Sin embargo, la nota discordante la puso el miércoles el vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, quien en una visita a Burgos se mostraba partidario de que Cs de Burgos decidiera en solitario apoyar las cuentas el PSOE, defendiendo «la independencia» del grupo municipal, «sin líneas rojas», siempre y cuando el acuerdo sea sensato. Un apoyo a los presupuestos que, según Igea, no debería estar supeditado a los intereses de Madrid. 

Sobre esta reflexión de Igea, el secretario provincial de Programas de Ciudadanos señala que no influye en este proceso de negociación y es un tanto incomprensible porque «sabe que que el proceso es de abajo a arriba», ya que son los concejales los que saben «qué deben incorporar al presupuesto». Añadió que lo que se hace desde la dirección provincial hacia arriba es «revisar que no vaya contra los principios del partido».

Los plazos para que haya acuerdo no están decididos, pero el pacto es inminente ya que la pretensión del PSOE es llevar los presupuestos a un pleno de febrero, ya sea el ordinario, que se celebraría el día 21, o en uno extraordinario, en el caso de que no diera tiempo, que podría fijarse el 28 de febrero o más tardar el 6 de marzo. El PSOE tiene claro que va a llevar el presupuesto al Pleno «con o sin aprobación». 

Preguntada por las conversaciones que los socialistas están manteniendo con la formación naranja, la portavoz del equipo de Gobierno, Nuria Barrio, aseguró que «se están desarrollando con absoluta cautela» y recordó que es «una prioridad llegar a acuerdos con Cs porque es con ellos con quien salen las cuentas».Cuestionada sobre si Cs ha solicitado entrar en el Gobierno local, la socialista aseguraba desconocerlo y prefería no pronunciarse al respecto.