Laboral
El ERE de Maxam afecta a la planta de Burgos
El expediente, comunicado el lunes, plantea una modificación«sustancial»de las condiciones de trabajo de la plantilla
La delicada situación de la compañía española de materiales energéticos y soluciones de voladura Maxam ha derivado en la presentación, por sorpresa, de unERE(Expediente de Regulación de Empleo) de extinción de más de 100 empleos en toda España que afecta a todos los trabadores de las oficinas centrales de Madrid, y otro centro en Maxam Holdin, así como a los centros de Galdácano (Vizcaya) y Quintanilla Sobresierra, en el Páramo de Masa.
Los sindicatos conocieron la presentación de este ERE en la reunión de la comisión mixta, formada por los sindicatos UGT, CC.OO. y ELA, así como el Sindicato Independiente Maxam (SIX), celebrada el pasado lunes la situación «dramática» de la empresa, según informa Europa Press. En el caso de la empresa ubicada en el Páramo de Masa no tiene el mismo NIF que otras empresas del grupo Maxam que sí tienen una representación sindical.
Desde el Sindicato Independiente Maxam explican que, antes del próximo 18 de febrero, se tendrá que nombrar a 13 representantes para la negociación del ERE en Holding y a tres representantes para el de Internacional.
Para el primero se nombrarán nueve delegados de CCOO de Madrid, uno de SIX de Galdácano, y otros tres representantes del colectivo de trabajadores de Burgos, mientras que, para el segundo, se designarán a otros tres representantes del colectivo de empleados, informa Europa Press. Más concreciónRepresentantes sindicales han mantenido una reunión con los trabajadores de la planta de Burgos para ofrecerles su colaboración. A partir de este momento, se abre un plazo en el que los representantes de los trabajadores recibirán en breve la documentación relacionada con la situación económica del grupo para revisarla y que sean los técnicos los que analicen los pormenores de una propuesta que, por el momento, es demasiado general, ya que las fuentes sindicales consultadas por este periódico señalan que plantear «más de 100» despidos es demasiado inconcreto.Se trata, en la mayoría de los casos, de puestos de trabajo especializados, por lo que la dirección abordó en primer lugar la reestructuración de la compañía, modificando así el orden del día establecido que barajaba el estudio del nuevo convenio colectivo, exponiendo la intención de negociar una modificación «sustancial» de las condiciones de trabajo, informa Europa Press. Hasta ahora, la empresa había incidido en que esta reestructuración solo afectaría a los trabajadores relacionados con la estructura de la organización, alegando principalmente que estas acciones vienen dadas por al duplicidad de puestos, asegurando que no se verían afectadas las plantas industriales.El pasado año ya se produjeron despidos en la planta de Burgos, con cerca de una decena, y otros centros de Madrid y Galdácano. No obstante, las fuentes sindicales consultadas por este periódico señalan que a pesar del ERE, en el caso de Burgos se trata de un centro que genera actividad, que «trabaja en medio mundo» con mucha obra civil.