De la Rosa acusa a la Junta de no regular la normalidad

No ha finalizado la primera semana de la nueva normalidad y se han despertado las primeras críticas hacia la Junta de Castilla y León por parte del Ayuntamiento de Burgos en relación con la gestión de los parques infantiles, de los aforos para actividades culturales y con la reapertura de las escuelas infantiles y de las piscinas de verano. 

El alcalde, Daniel de la Rosa, asegura que terminado el estado de alarma el Gobierno regional «ha colocado a los ayuntamientos a los pies de los caballos». Más coloquialmente, el primer edil denuncia que «la Junta nos ha pasado el muerto de tener que ordenar la movilidad, el consumo y los servicios públicos» sin que se haya derrotado al coronavirus, sin especificar cómo hacerlo y sin medios económicos. «Estamos volviéndonos locos», añade con respecto a la interpretación del acuerdo de 19 de junio publicado por al administración regional en el Boletín Oficial de Castilla y León.

Como ejemplo, De la Rosa pone los parques infantiles de la ciudad dado que la Junta especifica que debe haber un niño por cada 4 metros cuadrados y una desinfección diaria de cada parque. «Los ayuntamientos no podemos poner un policía en cada parque y en cuanto a la limpieza diaria es prácticamente imposible teniendo en cuenta que tenemos 176 parques en toda la ciudad, no tenemos recursos suficientes», precisa.

De esta manera, el Ayuntamiento ha tomado la decisión de mantener abiertos y desinfectados una vez al día solo 33 parques y se ha elaborado una lista por distritos. Cinco en la zona Centro-norte, seis en el Oeste, seis en el Este, siete en el Sur, siete más en el Periférico y uno en Castañares.

Aun así, De la Rosa entiende que la limpieza diaria no garantiza no contagiarse de Covid-19 y realiza un llamamiento a las familias para que sean responsables en cuanto al distanciamiento social, a las medidas de higiene y con respecto al uso de las mascarillas. El alcalde no tiene dudas con respecto a volver a clausurar todos los parques si no se respetan las pautas de comportamiento.

Para realizar las tareas de mantenimiento, el área de Medio Ambiente está trabajando en una modificación del contrato para poder destinar los recursos humanos y económicos necesarios ya que es una actividad nueva que va más allá del contrato de limpieza diaria o del de mantenimiento de los parques infantiles. En concreto, se calcula que el coste será de 90.000 euros y no podrá estar listo este cambio antes de un mes.

Las pistas deportivas públicas, un total de 73, se van a mantener abiertas y en 15 de ellas, las más utilizadas, se hará una limpieza diaria. Aunque se advierte que si se observan concentraciones de jóvenes sin respetar las medidas higiénicas se podrían volver a cerrar.

En cuanto a la interpretación de los aforos, reclama a la administración regional que aclare porque en algunas instalaciones se permite el 75% y en otras se limita a 500 personas. Asegura que el Instituto Municipal de Cultura está tratando de organizar un verano «excepcional» en cuanto a actividades de todo tipo, pero surgen dudas continuamente. «Necesitamos certidumbre sobre si en un espacio como el Coliseum podrán entrar más de 500 personas para poder programar un concierto de gran formato como colofón en el último fin de semana de agosto donde se van a concentrar varios días de festejos en sustitución a San Pedro», exige.

Piscinas municipales

La interpretación de la normativa para reabrir las piscinas de verano y las escuelas infantiles ha supuesto también decenas de dudas para las administraciones locales. El Ayuntamiento de Burgos «se ha lanzado» a abrir en el caso de las instalaciones deportivas, pero solo para los abonados porque la Junta ha pedido que ante la posibilidad de cualquier contagio en la piscina se pueda localizar a las personas que han pasado por las instalaciones en cada jornada. 

Durante los próximos 15 días se va a examinar cómo funcionan estas restricciones en los accesos a la piscina y aclara el alcalde que no descartan que se puedan vender entradas para los burgaleses no abonados en función de si quedan plazas libres, pero también mediante reserva previa.

Las escuelas infantiles públicas está previsto que vuelvan a prestar servicio en la segunda quincena de julio aprovechando que se firma el nuevo contrato para su gestión dado que la Junta de Castilla y León indica en la orden que pueden abrir, aunque el alcalde señala que no se especifica «el cómo abrir».

De la Rosa defiende que los ayuntamientos están haciendo «esfuerzos titánicos» para prestar servicios y recuerda que durante todo el estado de alarma ha demostrado «lealtad» hacia las medidas tomadas por la institución regional. «He apoyado la política de prevención ante el contagio y la lucha sanitaria frente a la pandemia sin una crítica», asegura.