Un millar de personas secunda la protesta de la Hostelería contra el recorte de horarios
Cerca de un millar de personas secundó esta mediodía en Burgos la protesta convocada en toda la provincia por las asociaciones de hosteleros para protestar por la reducción de horarios de apertura hasta las 22:00 horas decretada por la Junta de Castilla y León. El presidente de los hosteleros de Burgos, Fernando de la Varga, hizo entrega de un comunicado al delegado de la Junta en Burgos, Roberto Saiz, y ambas partes se emplazaron para seguir debatiendo esta medida en una reunión fechada para el próximo martes.
Además de la Federación de Comercio de Burgos, a esta protesta se sumaron empleados y empresarios del sector de la distribución de hostelería y diversos proveedores, que están también directamente afectados por las restricciones a los bares y restaurantes ya que son sus clientes. De hecho, desde las empresas de distribución se había organizado una caravana con los camiones y furgonetas de reparto que tenía previsto circular alrededor de la rotonda mientras los hosteleros y el resto de manifestantes permanecían en las aceras. Sin embargo, la Policía Local cortó completamente el tráfico en la glorieta de Bilbado frente a la Junta por lo que los vehículos no pudieron acceder y los manifestantes acabaron estrechando el círculo frente a la Delegación de la Junta coreando consignas en contra del cierre, el presidente del Gobierno y contra el vicepresidente de la Junta, Franciso Igea, a quien se le exigía la dimisión en algunas pancartas.
"Como nos piden que paguemos impuestos si no nos dejan tener ingresos", rezaba la pancarta que sostenía una hostelera. Un reproche que se unió a la advertencia del presidente de la Federación de Hostelería del impacto que estas medidas están teniendo en las familias que dependen de este sector y el coste económico que padecen las empresas.En ese sentido descartó un cierre masivo de bares y restaurantes que sólo iría a expensas de las ya menguadas arcas de los hosteleros, que no pueden permitirse, explicó, perder un día de ingresos en esta situación.
El sector recuerda que ha realizado un «gran esfuerzo» en el ámbito económico y organizativo para adecuar sus establecimientos a las medidas higiénico-sanitarias y restricciones impuestas por el Gobierno en cada momento. Sin embargo, lamentan que además de los requisitos y restricciones establecidos, no se ha elaborado ningún plan de contingencia para revitalizar al turismo y la hostelería.
«Después de todo, los extraordinarios esfuerzos del sector no han encontrado equivalencia en la administración y se está señalando constantemente al sector como el foco de los contagios, lo cual es incierto, además de producirles un daño económico incalculable que de prolongarse en el tiempo provocará el cierre de un buen número de empresas y las pérdidas de miles de puestos de trabajo», subrayan. Por este motivo, los hosteleros solicitan la modificación de horarios con una ampliación de los mismos hasta las 12 horas de la noche, «para salvar una parte importante del sector».