De la Rosa aborda un segundo plan de crisis para llegar a más sectores

El equipo de Gobierno comienza las conversaciones con los portavoces de todos los grupos municipales para poner en marcha el segundo plan de choque frente a la crisis económica del Covid-19 con la idea de que entre en vigor con el presupuesto de 2021. Así lo avanzaba ayer el alcalde, Daniel de la Rosa, que prevé que la aprobación inicial de las cuentas pueda estar lista en enero.Son varios los objetivos que se plantean conseguir como llegar a sectores que en la primera convocatoria se quedaron fuera, como guarderías infantiles privadas o gimnasios, lograr el máximo consenso entre los grupos municipales, pero el principal reto, como indica el primer edil, es «acertar en el procedimiento» para que las ayudas lleguen a los destinatarios.El alcalde reconoce que en el primer plan de crisis, respaldado por unanimidad de todas las fuerzas políticas el pasado abril, ha tardado mucho tiempo en poder habilitarse debido a que la tramitación administrativa ha sido compleja. Las ayudas al alquiler de negocios de hostelería y comercios por el tiempo que estuvieron cerrados durante el primer estado de alarma empezarán a abonarse a los beneficiarios antes del 24 de diciembre. Y es previsible que en enero puedan salir las ayudas a autónomos que hayan reducido su facturación como consecuencia de la crisis económica.Además, de cara enero se pondrá en marcha la nueva campaña de bonos al consumo con una partida de 500.000 euros que, previsiblemente, vayan más destinados a la hostelería dado que no se han podido beneficiar de la primera ya que se ha desarrollado cuando han estado cerrados.El segundo plan de choque recogerá medidas como las relatadas anteriormente, pero como precisa De la Rosa se buscará que sea «más eficaz»  a la hora de trasladarlas «con prontitud». De cara a buscar el consenso de los grupos y los sectores implicados, el próximo lunes se convocará el observatorio de seguimiento del primer plan de choque con al idea de conocer el mayor número de propuestas. Por otro lado, en la comparecencia de ayer, el alcalde dio cuenta de algunos de los asuntos tratados en la reunión del Centro de Coordinación Operativa (CECOPI) en el que se puso de manifiesto que los datos de la incidencia de contagios van a la baja en la capital burgalesa (con 466 casos acumulados por 100.000 habitantes en los últimos 14 días).Desde el Ayuntamiento se ve con satisfacción esta mejoría que conllevará que este viernes puedan reabrir los establecimientos de hostelería, más allá de las terrazas, pero con un 33% de aforo, así como los centros deportivos. Sin embargo, De la Rosa realiza un llamamiento a la cautela y a la responsabilidad personal para evitar que con la disminución de las restricciones proliferen comportamientos de riesgo que lleven a un repunte de contagios como se está viendo en otras provincias.De esta manera, se muestra partidario de que la hostelería abra con ese aforo del 33% y sin la posibilidad de consumo en barra y no al 50% como han solicitado los profesionales del sector en los últimos días. «Igual que era partidario de que además de las terrazas se hubiera permitido abrir antes al 33%, para llegar a ese 50% sí que esperaría hasta el siguiente fin de semana (en referencia al que se inicia el 25 de diciembre)», comenta.En un nuevo bando municipal, se recuerda que las restricciones regresarán  si la incidencia vuelve a repuntar. «Es probable que las autoridades sanitarias tomen medidas aún más restrictivas y, por tanto, tenemos que interiorizar este mensaje para cumplir todas las recomendaciones», precisa.A la vez insiste en que es en el ámbito de confianza en reuniones familiares o con amigos en los que se producen los contagios dado que se relajan las medidas de seguridad. «Me da igual que nos digan que somos pesados en algunas ocasiones, pero es necesario que los vecinos mantengan la tensión para no provocar esa posibilidad de incremento de casos», mantiene.