La oscuridad que deja el cierre del comercio
Comercios de Gamonal, centro de Burgos y Briviesca participan en la campaña ‘Gran apagón’ para reivindicar la necesidad de consumir en el comercio local / «Desgraciadamente el apagón de escaparates simulado muestra el preocupante saldo negativo del comercio local: se cierran más tiendas que se abren»
La gran parte del comercio de Gamonal, el centro de la capital y Briviesca apagaron sus escaparates. La primera consecuencia, son calles en sombra. Es la oscuridad que deja la ausencia del comercio de proximidad. Un apagón simulado, por el Día de los Inocentes, pero que puede convertirse en realidad dada la situación crítica que atraviesa el sector.«La realidad es que hay muchos cierres y pocas nuevas aperturas y las que hay, al final, cierran muy pronto con lo que el saldo es negativo en los últimos años», explica el técnico de la Asociación de Comerciantes de Zona G, Borja García.Así, los escaparates apagaron sus luces, aunque «en el interior se seguía atendiendo a la gente porque una jornada en plena campaña de Navidad no se puede parar». A partir de las 19.30 calles emblemáticas con la de Santiago, Derechos Humanos o la calle Vitoria mostraban el aspecto desangelado, triste y oscuro que deja el apagón de las tiendas. «Hemos repartido carteles de SE VENDE con el mensaje de que si no se compra en el comercio local el cartel se convertirá en realidad», resume.La leyenda de este distintivo explica que ‘Hoy afortunadamente, es una inocentada, pero si no compramos en el comercio local, este cartel muy pronto será real. No dejes morir el barrio». Incluye la etiqueta #Compraenlocal y sobre los logotipos del Ayuntamiento de Burgos, la Junta de Castilla y León y el Gobierno de España ‘Necesitamos ayuda’. La iniciativa, que se lanzó en 2018, mantiene su cita en el calendario porque la situación es crítica. Pero la Covid ha acelerado esa crisis de las tiendas de barrio y del comercio local. Las restricciones, ante la situación de pandemia, han empeorado la situación en el comercio y la hostelería. Apuntan desde Zona G que los cierres «son continuos» y, recuerdan, esta situación «conlleva la destrucción de puestos de trabajo». Floja campaña de NavidadComo ejemplo la campaña de Navidad que están siendo regular, aunque depende de sectores. «En el ámbito del equipamien”to del hogar va muy bien, la gente está más tiempo en casa y compra cosas para mejorarla», valora Borja García. Por el contrario, en el equipamiento de la persona «son los más perjudicados, el teletrabajo, la falta de espacios de ocio hace que la gente no necesite comprar productos como vestido o zapatos».Un ejemplo que ponen en Zona G es el mercado de vestidos y trajes para Nochevieja «muchos comercios no han traído ese producto porque no se va a vender». En la misma línea, expresa que aquellos comercios que han apostado por canales alternativos de venta a lo presencial han tenido un mejor resultado durante este tiempo. «Los que han potenciado las ventas por redes sociales o que han montado una web o por el móvil han funcionado un poco mejor», señala. Todo es poco para evitar que los comerciantes cierren la persiana definitivamente y dejen en sombra las calles de la ciudad.